La madrugada del domingo 8 de junio de 2025, el rapero ecuatoriano Forty MC, de 29 años, fue asesinado en circunstancias aún poco claras.
El crimen, ocurrido en el sector de Iñaquito, norte de Quito, ha desatado una serie de interrogantes que ni la Policía ni la justicia han logrado aclarar con contundencia.
Horas después del homicidio, Richard Dávila, jefe del distrito Eugenio Espejo de la Policía Nacional, ofreció declaraciones afirmando que un sospechoso había sido aprehendido.
Según sus palabras, al momento de su detención el individuo portaba un arma de fuego, drogas y una motocicleta reportada como robada.
Sin embargo, el expediente judicial revela una historia distinta. El ciudadano detenido, de nacionalidad colombiana y 50 años de edad, no fue arrestado como parte de una investigación por asesinato, sino en respuesta a una denuncia ciudadana por alteración del orden público.
Según el informe policial, los agentes fueron alertados inicialmente sobre una pelea en el sector, pero no pudieron ingresar al domicilio involucrado por no contar con una orden judicial.
Horas después, una nueva llamada al ECU911 denunció que un hombre disparaba contra vehículos en la vía pública. Al regresar al lugar, los agentes encontraron al sospechoso escondido dentro de un armario. Durante el registro del inmueble hallaron droga, municiones, prensas para empaquetado de sustancias y documentos presuntamente relacionados con préstamos ilegales (conocidos como “chulco”).
El hombre fue procesado en flagrancia por tráfico de drogas y porte ilegal de armas, pero en ningún punto del documento judicial se le vincula formalmente con el asesinato de Forty MC.
La jueza que tomó el caso no acogió el pedido de prisión preventiva solicitado por la Fiscalía, y en su lugar ordenó presentaciones periódicas del acusado, dos veces por semana.
Poco después, la misma jueza presentó un acto de inhibición para continuar con el proceso.
Mientras tanto, el círculo cercano del rapero exige respuestas. Amigos, familiares y seguidores de Forty MC realizaron una caravana con su féretro por las calles de La Tola, en señal de homenaje y protesta. La despedida concluyó con un velorio privado organizado por la familia.
Hasta el momento, no hay hasta ahora un imputado formal por el crimen, y la falta de claridad alimenta el desconcierto entre quienes conocieron de cerca a Forty MC.
La instrucción fiscal abierta contra el ciudadano extranjero durará 30 días.