El juicio federal contra Sean “Diddy” Combs comenzó el 12 de mayo de 2025 en Nueva York, con acusaciones que podrían llevarlo a cadena perpetua.
¿De qué lo acusan?
La fiscalía lo señala como líder de una red criminal que, durante dos décadas, organizó fiestas sexuales coercitivas conocidas como “Freak Offs”, donde mujeres eran drogadas, manipuladas y sometidas a actos sexuales degradantes, muchos de ellos grabados sin consentimiento.
Cassie Ventura, exnovia de Combs, es una testigo clave. Según la fiscal Emily Johnson, Combs utilizó su poder para controlar y abusar de Ventura, incluso chantajeándola con videos sexuales grabados sin su permiso.
Los fiscales describieron las “Freak Offs” como orgías de varios días, donde mujeres eran obligadas a consumir drogas y participar en actos sexuales, frecuentemente grabados por Combs. Según la acusación, el artista utilizaba estos videos para chantajear a las víctimas y evitar que denunciaran los abusos.
“Escucharán testimonios de mujeres que describen algunos de los momentos más dolorosos de sus vidas”, afirmó Johnson. “Los días que pasaron en habitaciones de hotel, bajo los efectos de las drogas, vestidas con disfraces para cumplir las fantasías sexuales del acusado”.
Un video de 2016, presentado en el juicio, muestra a Combs agrediendo físicamente a Ventura en un hotel de Los Ángeles.
La defensa admite comportamientos abusivos y un estilo de vida “kinky”, pero argumenta que todas las relaciones fueron consensuadas.
Sin embargo, testimonios como el de Daniel Phillip, un escort masculino, describen escenas de violencia y humillación, incluyendo un incidente donde Combs supuestamente obligó a un hombre a orinar sobre Ventura.
Condena que puede enfrentar
Si es declarado culpable de los cinco cargos de conspiración de crimen organizado, tráfico sexual y transporte para participar en prostitución, Combs enfrenta una pena mínima de 15 años de prisión, que podría extenderse a cadena perpetua.