Linda De Sousa Abreu, una funcionaria de la prisión HMP Five Wells en Wellingborough, Reino Unido, ha sido suspendida de su cargo tras mantener relaciones sexuales con un recluso de la cárcel el pasado 28 de junio y grabar el incidente, que luego fue difundido en redes sociales. La trabajadora ha admitido su culpabilidad en un tribunal de Isleworth en agosto, donde fue concedida libertad bajo fianza condicional.
En el juicio celebrado este mes, el juez determinó que Abreu había incurrido en mala conducta en su puesto de trabajo, motivo por el cual fue suspendida de todos sus cargos en la prisión. Las imágenes de la grabación, en las que la funcionaria aparece con su uniforme oficial, fueron captadas por otro recluso. En el video, el preso afirma que habían “hecho historia” antes de girar la cámara hacia él mismo, sonreír y declarar que así se comportan en la prisión de Wandsworth. La grabación fue compartida posteriormente entre otros reclusos y amigos fuera de la cárcel.
Este incidente ha generado gran preocupación sobre la seguridad y la ética dentro de las prisiones del Reino Unido, destacando la necesidad de mantener la integridad de los funcionarios y la disciplina dentro de las instalaciones penitenciarias.
Además, después de que el escándalo saliera a la luz, se reveló que Linda De Sousa Abreu, quien posee pasaporte portugués, estaba casada con un luchador de MMA y había participado en un programa de intercambio de parejas titulado Open House: The Great Sex Experiment en el Canal 4. En el programa, que seguía a parejas swingers, Abreu y su esposo participaron en un retiro de lujo con el objetivo de explorar si las relaciones abiertas y el sexo con otras personas podrían fortalecer su vínculo. Este detalle ha añadido más controversia al caso, dado el perfil público y las circunstancias personales de la funcionaria.