Los padres de Pamela Cabanillas, conocida como Estafadora de entradas de Daddy Yankee en Perú, también estarían involucrados en estafas. Así lo ha revelado un medio local que asegura que desde abril de este año, la joven de tan solo 18 registra denuncias de ese tipo.
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En abril de este año, Cabanillas ya contaba con denuncias por estafa. Así lo mostró en un video Panorama. Ese medio mostró una captura de la denuncia donde se leen los nombres completos de sus padres y el de ella. Según la acusación, ya habría delinquido junto a sus padres.
Pamela es señalada por las autoridades como la líder de los ‘Los QR de la estafa’ y haberse apoderado de más de medio millón de dólares. Habría estafado en las entradas de conciertos como de los cantantes Bad Bunny, Karol G y Coldplay.
El dinero ya se lo gastó. En zapatillas, ropa de marca, restaurantes costosos y buenos tragos. Dicho por ella misma. “Soy una persona que le gustan mucho las zapatillas, vestirse bien, comprarse ropa cara, salir a comer a lugares caros, tomar buenos tragos, soy de esas personas”
Padre de Pamela rompió el silencio
El medio peruano, La República se comunicó con el padre de Pamela y este mencionó que, “por motivos familiares”, no tiene contacto con su hija desde hace meses. Y que no sabía que venía realizando estos hechos ilícitos.
“No tengo conocimiento del paradero de mi hija. Yo estoy separado de su madre y desde que Pamela cumplió 18 años, en marzo, yo ya no he podido tener un contacto directo con ella. Más bien, me gustaría poder ubicarla y conversar con ella, yo no sabía nada de esto que ha pasado”, indicó al diario. Por otro lado mencionó que esta situación lo viene perjudicando en el ámbito laboral.
¿Cómo operaba?
Utilizaban entradas auténticas - tanto la información tanto del QR como del código de barras- y generar los boletos falsos. Entonces, mediante personalidades conocidas de las redes sociales como influencers y tiktokers se encargaban de generar confianza en las personas para que compren los boletos falsos.
Los estafadores usaron el mismo boleto para ofrecerlo a sus diferentes víctimas, que nunca se percataron del engaño. “Se ha producido la venta fraudulenta de hasta en 75 oportunidades la misma entrada. No había manera de identificar que la víctima lo detecte hasta el momento que pretenda entrar, y obviamente el lector va a permitir el acceso una sola vez”, declaró en una rueda de prensa el coronel Manuel Cruz, jefe de la División de Estafas de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri).