Una de las principales peleas del campeonato de artes marciales mixtas (MMA) de Cage Warriors 106 terminó «sin un ganador seguro en la superficie». Esto después de que un octágono se llenara de sangre. El hecho ocurrió en Londres a finales de junio.
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El choque entre el escocés Ross Houston y el danés Nicholas Dalby se suspendió en la segunda ronda. La razón fue que empezó un verdadero «baño de sangre».
Según Infobae, la pelea lesionó a ambos participantes en las primeras rondas. Dalby sufrió un corte en el codo y luego rompió la nariz del rival.
La cantidad de sangre de las heridas de los combatientes era preocupante. Por tal motivo, los doctores y el juez Marc Goddar decidieron detenerla.
Los dos peleadores entendieron la decisión, se dieron la mano y finalizaron la batalla. A pesar de todo, ellos fueron animados por la audiencia.
Una revancha está programada para el UFC Copenhague en Dinamarca el 28 de septiembre.
