La modelo rusa y exreina de belleza Kseniya Alexandrova, quien representó a su país en el certamen de Miss Universo 2017, murió a los 30 años tras permanecer un mes en coma debido a un accidente de tránsito en la región de Tver, Rusia.
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De acuerdo con medios locales, Alexandrova viajaba junto a su esposo en un Porsche de lujo cuando un alce se cruzó repentinamente en la vía e impactó contra el parabrisas del vehículo. El animal, que puede llegar a pesar hasta 450 kilos, provocó severos traumatismos en la joven.
Su esposo, quien conducía el automóvil, relató que no tuvo tiempo de maniobrar: “Desde el momento en que saltó hasta el impacto transcurrió una fracción de segundo. El golpe le dio en la cabeza a Ksyusha”. Aunque ambos llevaban cinturón de seguridad, los airbags no se activaron.
Tras el siniestro, Alexandrova fue trasladada a un hospital de Rzhev y luego derivada a Moscú, donde permaneció en estado crítico. Según el parte médico, desarrolló meningitis y una infección que derivó en sepsis sanguínea, complicaciones que finalmente le causaron la muerte.
La organización Miss Universo lamentó la pérdida y expresó que su “gracia, belleza y espíritu dejaron una huella imborrable en la familia Miss Universo y más allá”. En redes sociales, seguidores y figuras públicas han compartido mensajes de condolencia y homenajes.
Alexandrova fue reconocida no solo por su paso en concursos de belleza, sino también por su carrera como modelo internacional. Su inesperada muerte ha causado conmoción en Rusia y en la comunidad de certámenes de belleza a nivel mundial.