Un equipo de buzos voluntarios encontró esta semana un vehículo sumergido en las costas de Cedar Beach, en el condado de Suffolk, Long Island (EE.UU.). Dentro del auto se hallaron restos humanos que, según las autoridades, corresponderían a Robert Long, un hombre que desapareció hace 15 años sin dejar rastro.
El automóvil fue detectado mediante tecnología de sonar de barrido lateral utilizada desde kayaks por las organizaciones civiles Exploring with a Purpose y Adventures with Purpose. El vehículo es el mismo modelo que conducía Long cuando fue visto por última vez en diciembre de 2010.
El auto estaba sumergido a cinco metros de profundidad
Los rescatistas voluntarios localizaron el coche a unos cinco metros de profundidad cerca de una rampa para botes en Cedar Beach. Dentro del vehículo hallaron huesos humanos, por lo que dieron aviso inmediato al 911. La Policía del Condado de Suffolk suspendió temporalmente las labores durante la noche y las retomó al día siguiente.
El coche fue extraído con grúa y trasladado para su análisis forense. Aunque aún no se ha confirmado la identidad oficial, las autoridades indicaron que en el interior había objetos personales que coinciden con los de Long.
La esposa de Long agradeció el hallazgo en redes sociales
Joanne Long, viuda de Robert, publicó un mensaje en un grupo de Facebook dedicado a la búsqueda de su esposo: “Los restos de mi esposo han sido recuperados. Estoy agradecida con cada persona que nos acompañó en este largo camino de angustia y esperanza”, escribió.
El caso no presenta indicios de crimen
Según el detective teniente Kevin Beyrer, hasta el momento no hay señales de violencia. Todo apunta a un posible accidente de tránsito en el que el vehículo habría salido de la vía y caído al mar. El médico forense del condado realizará las pruebas necesarias para confirmar la identidad de los restos y establecer la causa de muerte.
Un cierre posible para un caso abierto desde 2010
El hallazgo reaviva la importancia de los grupos voluntarios que, con recursos limitados, utilizan tecnología para ayudar a resolver casos de personas desaparecidas. “Este es el tipo de casos que la mayoría olvida, pero nosotros no”, declaró Bill McIntosh, operador del sonar que detectó el vehículo sumergido.
Con este descubrimiento, la familia de Robert Long podría finalmente obtener respuestas luego de casi 15 años de incertidumbre.
