Un hecho insólito y vergonzoso ocurrió este lunes en Mendoza, Argentina. Un hombre de 53 años llamó al 911 asegurando que su auto había sido robado. La Policía activó de inmediato un operativo de búsqueda.
Según medios locales, el denunciante afirmó que su carro fue sustraído de la zona de las calles 20 de Junio y Sarmiento. El reporte movilizó las autoridades argentinas.
Un comerciante del sector dijo conocer al supuesto afectado, pero aclaró que no lo había visto llegar en vehículo. Ante la duda, se inició un cerrojo policial en el sector. Poco después, los uniformados se trasladaron al domicilio del denunciante, en el callejón Los Paraísos.
Allí, la pareja del hombre desmintió la historia: el auto estaba estacionado desde hace varias horas. No había robo alguno. Los oficiales confirmaron que el hombre estaba ebrio. Un test de alcoholemia reveló 1.70 gramos de alcohol por litro de sangre.
El hombre fue trasladado a la Comisaría 60, donde le fue levantada un acta de contravención por denuncia falsa agravada por consumo de alcohol, según disposición del juez de faltas.
Casos como este no son aislados. En otro episodio reciente, un joven en Palermo, Buenos Aires, denunció que le habían robado el auto, pero al recorrer el barrio junto a la Policía descubrió que lo había estacionado en una calle con una fachada casi idéntica. Su caso se volvió viral en redes.
