Un hombre identificado como Ramón Ismael Ortega, de 50 años, fue asesinado de un disparo por su empleador, Ernesto Isuani Mazzeo, de 73 años, luego de acudir a su domicilio para solicitarle el pago del aguinaldo. El hecho ocurrió en la localidad de Tupungato, provincia de Mendoza, Argentina.
Según las investigaciones, Ortega y Mazzeo se encontraban consumiendo bebidas alcohólicas cuando la conversación derivó en un reclamo salarial. Testigos afirman que el empleado comenzó a exigir el aguinaldo, lo que desencadenó una discusión que rápidamente se tornó violenta.
Una pelea, un cuchillo y un disparo mortal
Durante el altercado, Ortega presuntamente atacó a su jefe con un cuchillo de cocina, provocándole heridas leves en la cabeza. Tras ello, el trabajador salió del lugar, pero regresó minutos después con un palo en la mano.
Mazzeo, en respuesta, extrajo una pistola calibre 9 mm y le disparó a Ortega, quien falleció de inmediato en el lugar. Luego del hecho, el empleador llamó al 911 y se entregó voluntariamente a la policía.
Las autoridades secuestraron el arma, el cuchillo y el palo como parte de la evidencia. El caso está siendo investigado por la Fiscalía N.º 20 de Tupungato, que analiza si se trató de legítima defensa o de un homicidio agravado.
Qué dice la justicia argentina
Por el momento, Mazzeo permanece detenido y a disposición de la justicia. La investigación deberá determinar si el disparo fue en defensa propia o si existe responsabilidad penal. La causa está catalogada como “homicidio agravado por el uso de arma de fuego”, aunque la figura legal podría cambiar según los peritajes.
