Noticias

Atentado a Miguel Uribe Turbay: los chats, la mujer y el segundo sicario bajo la lupa

El candidato sufrió un atentado cuando estaba dirigiéndose a la ciudadanía en un barrio de Bogotá

La madrugada del domingo 8 de junio marcó un momento crítico para la política colombiana. El joven precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay fue sometido a una primera cirugía de emergencia tras recibir dos impactos de bala: uno en la cabeza —donde un proyectil quedó alojado en la zona occipital— y otro en la rodilla izquierda.

Se conoció que la cirugía fue todo un éxito.

El ataque ocurrió el sábado a las 17:30, en un mitin político improvisado en el barrio Modelia, al occidente de Bogotá, a pocas cuadras del aeropuerto El Dorado.

El presidente Gustavo Petro, en una alocución cercana a la medianoche, ofreció un informe preliminar sobre el atentado.

Confirmó que Turbay contaba con un esquema mixto de seguridad de la Unidad Nacional de Protección (UNP) y la Policía Nacional, y que el evento no había sido programado oficialmente, lo cual alimenta la hipótesis de un seguimiento premeditado por parte de los sicarios.

Un ataque planeado con precisión

Los atacantes utilizaron una pistola Glock semiautomática, con capacidad para 18 disparos.

Se realizaron al menos nueve tiros: tres impactaron a Turbay, uno rozó a un joven espectador y otro alcanzó a una mujer de 36 años. Las autoridades aprehendieron a un menor de 15 años con el arma en su poder, quien ahora figura como pieza clave en la investigación.

El adolescente ya habría comenzado a cooperar, asegurando que está dispuesto a revelar quién le dio la orden de atentar contra el político.

La captura fue ejecutada por Ricardo Céspedes, miembro de la UNP asignado al concejal Andrés Barrios, quien acompañaba a Turbay en el acto.

El rol de una mujer en el lugar de los hechos

Un aspecto que intriga a las autoridades es la participación o cercanía de una mujer de aproximadamente 52 años, que aparece en videos y fotos virales difundidos por redes sociales, incluso por el exalcalde Enrique Peñalosa. Se investiga si esta mujer —ubicada a espaldas del sicario— intercambió palabras con Uribe Turbay o con el atacante, poco antes del atentado.

Pistas digitales

Uno de los elementos más reveladores es un chat hallado en el celular del menor detenido, donde se lee: “Tiene que ser hoy (...) A la hora que sea (...) Cogemos cualquier Indriver”. El remitente sería un tal ‘Jhon Estiven’, cuyo número ya está en manos de las autoridades.

El país sigue de cerca este caso, que mezcla violencia política, sicariato juvenil y la fragilidad de la seguridad electoral.

Mientras Miguel Uribe Turbay se recupera, Colombia se enfrenta a nuevas preguntas sobre la protección de sus líderes y el reclutamiento criminal de menores.

Síguenos en Google News:Google News

Contenido Patrocinado

Lo Último