Con más de veinte elementos de convicción presentados por la Fiscalía, se ha llamado a juicio a Carlos Eriverto G. por el presunto femicidio de su exconviviente en Gualaceo.
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La tragedia, que ocurrió la mañana del 12 de diciembre de 2024, reveló detalles escalofriantes, como el hallazgo de un papel con la frase “Es casado mi padre, puerca” junto al cuerpo de la víctima.
Los escalofriantes hechos
La Fiscalía General del Estado confirmó esta decisión tras una audiencia en la Unidad Judicial Penal de Gualaceo, donde se ratificó la prisión preventiva del procesado.
La víctima, de 38 años, residía en Gualaceo con sus cuatro hijos, fruto de su relación con Carlos Eriverto G., de quien se había separado un año antes debido a constantes maltratos físicos y psicológicos.
Agresión premeditada e intento de encubrimiento
La investigación sugiere que el presunto femicida planeó el ataque. Tras llevar a sus hijos a la escuela, regresó dos veces a la vivienda y, en la última visita, la habría atacado con un objeto contundente en la cocina. Luego, intentó simular sorpresa al encontrarla, buscando ayuda para encubrir el hecho.
Una pericia confirmó que la nota encontrada fue escrita por el agresor. La autopsia determinó la causa de muerte como traumatismo cráneoencefálico. Carlos Eriverto G. intentó huir, pero vecinos lo retuvieron y entregaron a la Policía.
Evidencias clave y patrón de violencia
Las pruebas, incluidas versiones de familiares y denuncias previas, indican que Carlos Eriverto G. ejercía una relación de poder basada en violencia, control, celos y amenazas.
Es procesado por femicidio (artículos 141 y 142 del COIP), delito que conlleva una pena de entre veintidós y veintiséis años de prisión. Este caso resalta la urgente necesidad de combatir la violencia de género en Ecuador.
