Franklin A. era conductor del taxi en el que se movilizó Hernán Mendoza la noche del pasado viernes 26 de enero de 2024, día que desapareció el joven de 30 años, en el norte de Quito. La Fiscalía General del Estado informó que con base en los elementos de convicción presentados, un Juez dictó prisión preventiva por el presunto delito de desaparición involuntaria, en contra de este ciudadano.
PUBLICIDAD
Según la investigación que lleva adelante la Policía Nacional y la Fiscalía, el presunto implicado y ahora procesado se encontraría involucrado en varios delitos de robo con el uso de escopolamina.
Se conocen que junto a otros sujetos llevaba haciendo este tipo de actos delictivos desde hace cuatro meses, en el norte de Quito, antes de la desaparición de Mendoza.
El Modus Operandi
Los antisociales sabrían operar de la siguiente manera: se acercaban a sus víctimas, interactuaban, los escopolaminaban, les robaban y después los dejan a su suerte en cualquier lugar de la ciudad.
El medio de transporte con el que presuntamente cometían los delitos habría sido el taxi de Franklin A., donde se subieron y perdieron el conocimiento Hernán Mendoza (de quien se desconoce su paradero) y su amigo, la noche del 26 de enero.
Por ahora el vehículo está en manos de la Fiscalía, quien continúa con las investigaciones.
En el cantón Mejía, la madrugada del 10 de febrero de 2024, en una operación denominada “Amanecer Radiante 1587″, la Policía Nacional ejecutó un allanamiento en un establecimiento de alojamiento en Tambillo, donde se detuvo a Franklin Geovanny A. Q., quien tenía una orden de captura en su contra por el delito de desaparición involuntaria.
