El joven ecuatoriano Kevin Wladimir Paredes Jiménez, de 25 años, murió en Bera (Navarra) por inhalación de monóxido de carbono y no por lo que en principio había informado las autoridades locales: quemaduras provocadas por una explosión de un dispositivo electrónico, según la autopsia realizada en el Instituto Vasco de Medicina Legal de Bilba.
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El informe de la autopsia señala que las quemaduras que presentaba el joven no fueron mortales. Por el contrario, habría inhalado monóxido de carbono, algo que sí resultaría letal. Así lo detalla el medio español La Vanguardia. La Guardia Civil aún realiza sus investigaciones respectivas y se centran en por qué se produjo el incendio en la habitación donde dormía Paredes.
El referido medio, en su sitio oficial, asegura que son dos hipótesis las que se barajan. Una es que el incendio pudo tener su origen en el dispositivo electrónico que estaba enchufado a la corriente. Otra es que se produjera un cortocircuito en la instalación eléctrica de la vivienda.
Los agentes de la Guardia Civil constataron que en la cabecera de la cama en la que estaba el joven estaba quemada. Igualmente detectaron que el dispositivo electrónico enchufado a la corriente eléctrica se encontraba calcinado.
Cuando llegaron al lugar de los hechos, el joven estaba en parada cardiorrespiratoria (paro cardíaco) y luego que fue atendido por los servicios sanitarios de emergencia, fue trasladado a la Unidad de Quemados del Hospital de Cruces, en Barakaldo. Lamentablemente murió.
Lo que se sabía del chico
El chico trabajaba de reponedor de estantes en un supermercado situado en Dantxarinea, uno de los establecimientos del área fronteriza entre Navarra y Francia. Así lo detalla el sitio El Diario de Navarra.
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Paredes estaba muy integrado en el pueblo navarro, ya que desde niño estudió allí, en el Colegio Sagrado Corazón de Bera. En 2010 jugó en un equipo de fútbol de la localidad. Concretamente, en el Gure Txokoa en la categoría de infantiles. Después practicó baloncesto, deporte en el que compitió con el equipo Toki Ona en la categoría de cadetes.
Kevin vivía junto a su madre, Zoyla Jiménez. Ella salió de Ecuador en 1999, debido a la crisis económica que atravesaba el país en ese momento. Se dedicó a la recogida de verduras, frutas y después fue costurera.
