El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, comparte con orgullo que su país sigue registrado días sin homicidios. En total se contabilizan más de 130 días en los últimos tres años desde que comenzó su mandato. La Policía de ese país anunció la cifra corresponde a muertes violentas de presuntos delincuentes o las desapariciones sin resolver.
Desde el 30 de julio han reportado cero homicidios y así lo comparten en sus redes sociales: “Aunque algunos gobiernos y ONGs nos “exigen” proteger a los pandilleros, nosotros estamos para proteger a la población honrada, que por PRIMERA VEZ en décadas, puede sentir lo que significa vivir verdaderamente en paz”, dice su tuit.
Críticas por los Derechos Humanos:
La disparidad en las cifras también iría en contra de las indicaciones internacionales, como las del Protocolo de Bogotá sobre calidad de los datos de homicidio en América Latina y el Caribe. Este documento fue elaborado en 2015 por casi cien autoridades y expertos regionales y de 12 países para “generar un concepto integrador de homicidio que permita la convergencia de las diferentes fuentes”.
También a mediados de mayo, una investigación de El Faro reveló que el éxito del Ejecutivo de Bukele contra las pandillas como Los Maras habría partido en cambio de una negociación, que se rompió con la captura de un cabecilla y la respuesta de los 76 asesinatos previos al estado de excepción.
