Ya parece que el día en que Ben Affleck y Jennifer López hagan oficial hagan oficial su divorcio está más cerca que nunca, pues las acciones que cada uno está haciendo por separado apunta que ya no hay marcha atrás y que cualquier posibilidad de reconciliación está fuera de este planeta.
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El actor se compró una casa de soltero en Los Ángeles, en los que piensa hacer una nueva vida sin JLo, tras dos años de matrimonio. Él estuvo viviendo alquilado en una mansión luego de que ambos decidieron vender el nido de amor, ubicado en Beverly Hills, que adquirieron juntos cuando se prometieron amarse “para toda la vida”. Ahora cada uno está por su lado, pero compartiendo en familia cuando es necesario.
Esta semana que conoció que la “Diva del Bronx”, al parecer no tomó de la mejor manera que su esposo se comprara una casa frente al mar, y ahora es ella quien desea mudarse, pero lejos de él. Según una publicación del medio de comunicación TMZ, la artista de 55 años fue captada visitando mansiones en venta.
La zona exclusiva en Los Ángeles, EE. UU, que visitó junto a su hija Emme es tan grande que parece una pequeña ciudad. La también actriz no solo ha puesto a la venta la casa con Affleck, sino que también cerró la venta de su apartamento en Nueva York.
¿La humilló y ahora está disfrutando de su soltería?
Una fuente cercana al diario Page Six, reveló que la cantante estaría muy “furiosa” por como él ha llevado todo el proceso de la separación, además, de que “él la ha humillado. Fue él quien lo empezó todo para que volvieran a estar juntos”, expresó el informante al referirse a la segunda oportunidad que amarse que se dio la pareja.
Ben y Jennifer tuvieron su primer romance en el 2002 y duró dos años. En esa oportunidad se comprometieron en matrimonio, pero no se casaron por la presión mediática, pero casi 21 años después retomaron lo que empezaron y se prometieron amarse para toda la vida.
“Él la ha humillado porque ella le dio una enorme importancia a que él es el amor de su vida. Han celebrado dos bodas hace apenas dos años. Es algo así como un récord, no son unos niños. Hay cinco niños implicados en esto. Ella sabía que iban a unir a sus familias. Todavía no acepta que todo haya acabado”, enfatizó el allegado a López.
Ahora, cada uno disfruta más tiempo con sus respectivos hijos y de vez en cuando se unen para compartir momentos especiales con los hijos de ambos.