Henry Alvarado ya sabía desde antes que ganaría MasterChef Ecuador. O al menos lo decretó con su positivismo. Aunque ya habían pistas de que se llevaría el título, solo un pequeño detalle lo delató y que no hicieron los finalistas.
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Cuando Alexandra, Victoria, Johanna y Henry se debatían un puesto en la final, cada jurado pasaba por las estaciones de los cocineros. El chef Jorge Rausch visitó al agrónomo guayaquileño en más de una ocasión. Cuando preparaba su plato fuerte le dijo “¿Nos vemos en la final?” y Henry le exclamó que sí.
Rausch, para hacerlo más seguro le mencionaba que esperaba ver al menos a un hombre en la final. “Usted no llegó hasta aquí para irse”. Y cuando Henry finalizó su entrada le expresó: “¡Bien jugado, papá!”. Una célebre frase del colombiano que sale cuando de verdad un plato tiene 10/10.
Un ‘detallito’ lo delató
Aunque en capítulos anteriores, Henry se cuidó de no mostrarlo; o al menos no lo tenía. Pero en la semifinal se le vio el tatuaje de la M de MasterChef Ecuador, encerrada en un laberinto rojo. Lo tiene casi a la altura de la muñeca.
Henry reveló a este diario que el tatuaje se lo hizo durante su estancia en la casa de MasterChef, en Colombia que es donde se grababa. Fue su gran amigo Andrés, ‘el Ajicero’ el encargado de plasmar esa pasión por el reality. Él tatuó a más de uno de los que participaron, como por ejemplo a Raúl, Victoria y Santiago.
Si Henry decidió hacerse ese tatuaje, seguramente ya en un punto de la competencia sabía que iba a ganar. Pero obviamente por temas de contrato no puede dar ni la más remota pista.
Como haya sido, solo queda felicitarlo ya que fue el participante más perseverante. Como todos ya saben, al tercer intento ingresó a las cocinas de MC luego que en dos ocasiones le cerraran la puerta. Nunca se rindió y pudo lograrlo.
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Ya en competencia, se esforzó y estudió muchísimo para cada día llevar su concepto a los jueces. Cocina criolla al más alto nivel. Sus platillos costeños los transformaba en un espectáculo gastronómico que mantuvo hasta el final. Su último plato no fue la excepción y se llevó el título de MasterChef del Ecuador.
En un ejemplo de esfuerzo y crecimiento personal, Henry se llevó un premio de USD 20.000 y un curso de alta cocina en una renombrada escuela internacional de arte culinario. Pero no solo eso, también un vehículo SUV Cheri Tiggo 7 Pro.
Henry se dedica a la producción agrícola de arroz, ingrediente que lo hizo hecho sobresalir en la competencia. Especialmente en la final, donde preparó un arroz con leche, coco y un quenelle de chocolate.