El capitán Andres Rivadeneira, jefe de la Unidad Nacional de Investigación y Protección de Niños, Niñas y adolescentes (Unipen) de la Zona 8 brindó los detalles de un caso de pornografía infantil donde el victimario es un hermano mayor y la víctima, una niña de 9 años.
«En julio pasado la maestra de este joven se nos acercó a contarnos que él la acosaba, le pedía que le envíe fotos desnuda, incluso, él le mandaba videos a ella», comparte el agente. En uno de esos materiales visuales enviados a la maestra el joven hoy detenido mostraba a su hermanita de 9 años, realizando contenido indecente, lo que llamó mucho más la atención de la docente que denunció el caso a la Policía.
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La noche del martes 17 de agosto la Policía irumpe la casa del joven y lo detiene, señalándole, incluso el material, que encontraton en su teléfono. Él no se resistió ni puso presión en acompañar a los uniformados.
Según la ley ecuatoriana, el delito de pornografía infantil está tipificado en el artículo 103 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) y se castiga con una pena de 13 a 16 años de prisión. Además existen agravantes en caso de que los abusadores y los menores sean familiares o pertenezcan al mismo círculo de convivencia. Bajo esas condiciones, la sanción podría llegar a ser de 22 a 26 años en la cárcel.
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La Policía se ha limitado a dar más detalles de este caso para proteger a la víctima. El joven acusado está a la espera de la audiencia de fijación de cargos.
