El número de personas fallecidas tras la caída de un árbol en una procesión celebrada el 15 de agosto en Madeira (Portugal) asciende a trece y hay un total de 49 heridos, siete de ellas de gravedad.
Los hechos ocurrieron al mediodía del martes 15 de agosto en el pueblo portugués de Monte, ubicado a las afueras de Funchal (capital del archipiélago de Madeira), tras la caída de un árbol centenario de grandes dimensiones sobre decenas de devotos que participaban en la romería de Nuestra Señora del Monte, una de las fiestas más relevantes de esta región insular.
El secretario regional de Salud del Gobierno Autonómico de Madeira, Pedro Ramos, informó en rueda de prensa de que entre los fallecidos hay un menor.
«Nuestra prioridad es tratar a los heridos y apoyar a las familias de las víctimas», insistió el secretario regional en presencia del presidente del Gobierno Regional de Madeira, Miguel Alburquerque, que mostró sus condolencias a las familiares de las víctimas.
Entre los heridos se encuentran personas extranjeras de Alemania, Hungría y Francia.
Además, también fue habilitado un operativo especial para dar apoyo psicológico a las familias de las víctimas.
Cientos de personas estaban congregadas a la espera del inicio de la procesión en la zona de «Largo da Fonte», cuando el árbol centenario de grandes dimensiones se desplomó sobre las devotos.
La respuesta ante la tragedia fue «eficaz, rápida y excelente», aseguró Ramos, que apuntó que el operativo de socorro se accionó al medio día y once minutos más tarde ya fue trasladado al hospital de Funchal el primer herido.
Alburquerque decidió decretar tres días de luto en el archipiélago luso.
El primer ministro de Portugal, António Costa, expresó sus condolencias a las víctimas de esta tragedia, mientras que el presidente, Marcelo Rebelo de Sousa, ya se encuentra en el archipiélago para conocer «in situ» lo ocurrido.
EFE
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