El machismo que ha imperado por tantos años ha hecho responsable a las mujeres por los embarazos. Ellas quedan mal si no quieren tener al hijo, ellas son las tontas que no se cuidaron, ellas son las asesinas si deciden abortar.
Los hombres se ha librado tanto de esta responsabilidad que los casos de abandono por parte de los padres es muy alto. Por lo tanto, los anticonceptivos masculinos prometen ser toda una revolución ya que el género masculino tendrá una mayor participación en la planificación familiar.
Mientras que los anticonceptivos femeninos están aprobados desde 1928, el de los hombres apenas este año tendrá el visto bueno.
Éste tiene el 99% de efectividad y casi ningún consecuencia secundaria. Las mujeres que toman las pastillas, inyecciones, y demás métodos inventados para ellas tienen que lidiar con demasiados efectos.
Las mujeres pueden llegar a tener; nauseas, calambres menstruales, acné, sensibilidad en los senos, cambios de humor, dolor de cabeza, aumento de peso y aumento del libido.
Por su parte, los hombres tendrían solamente cambios de humor, dolor en la zona de la infección y aumento del libido. Aunque dependerá mucho de la marca y el sujeto dado que todo organismo es igual.
Esto es un gran paso a una mayor equidad de género, y aunque parezca intrascendente, la inyección anticonceptiva equilibra más las cosas. Esto obliga al hombre a sentirse más responsable.
