En piscinas públicas es una medida obligatoria ducharse antes de entrar al agua; pero ¿cuál es el motivo? Un reporte de la cadena BBC de Londres explica que no es una cortesía higiénica hacia los otros bañistas, sino una medida importante para mantener la salubridad del agua.
El agua de las piscinas se trata con cloro y desinfectantes para matar bacterias y evitar el contagio de enfermedades infecciosas. El cloro reseca el pelo, la piel y su olor puede quedarse durante horas pegado al cuerpo aún después de una buena ducha, pero para la gran mayoría de la población la exposición a los niveles estándar de este desinfectante en las piscinas es inofensiva.
Lo que sí puede interferir con nuestra salud es la mezcla del cloro con otros productos químicos que los bañistas traen al agua y que generan un derivado dañino, la cloramina.
¿Cómo se contamina el agua?
La orina es el ingrediente ‘añadido’ más conocido. Un estudio de la universidad canadiense de Alberta encontró que en todas las piscinas analizadas restos de un edulcorante artificial que solo podía haber llegado allí a través de la orina.
Pero además, cada bañista aporta al agua su propia colección de químicos: además de restos de heces y sudor, portamos sobras de productos de higiene personal como cremas, champús, lociones y acondicionadores.
Todos esos componentes interactúan con el cloro de la piscina y forman compuestos orgánicos volátiles, potencialmente dañinos, que los bañistas pueden respirar y que pueden causar irritación en los ojos y en el sistema respiratorio. Esos residuos provocan ataques de tos o de asma.
Los compuestos dañinos que se desprenden de las reacciones químicas en el agua pesan más que el oxígeno y forman una especie de “burbuja de cloramina” en la superficie de la piscina.
Los niños son los más expuestos
Además, los niños pequeños son los más expuestos a estos químicos nocivos porque tragan más agua. Aunque no hay evidencia de que la exposición a estos químicos pueda causar problemas graves de salud, estos compuestos que se forman con la interacción humana tampoco se han estudiado en detalle y pueden afectar a unas personas más que a otras.