En un esfuerzo por mitigar los riesgos de incendios y emergencias durante la transición al 2026, el Cuerpo de Bomberos de Guayaquil anunció la suspensión temporal de la venta de combustible en toda la ciudad.
La medida, que se ha vuelto una disposición habitual en festividades de alta peligrosidad, busca salvaguardar la integridad de los ciudadanos y de las infraestructuras estratégicas.
La suspensión de atención al público entrará en vigor el miércoles 31 de diciembre de 2025, a partir de las 22:00, y se extenderá hasta el amanecer del jueves 1 de enero de 2026, a las 06:00.
Además de la prohibición de venta en surtidores, la institución bomberil solicitó de manera expresa que no se realice el transporte de combustible en tanqueros dentro del perímetro urbano durante este mismo periodo de ocho horas.
Respaldo legal y prevención
La disposición se ampara en el artículo 35 de la Ley de Defensa Contra Incendios, el cual faculta a los jefes de los cuerpos de bomberos para adoptar “todas las medidas necesarias para prevenir flagelos dentro de su respectiva jurisdicción”.
Según explicaron las autoridades, la noche de Fin de Año es una de las de mayor riesgo operativo debido al uso masivo de pirotecnia, la quema de monigotes y el incremento de incidentes relacionados con materiales inflamables.
Lo que sí funcionará
Para tranquilidad de los usuarios que necesiten otros suministros, el comunicado aclara que la restricción aplica únicamente al despacho de hidrocarburos. Los minimarkets y tiendas de conveniencia ubicados dentro de las estaciones de servicio podrán operar con normalidad, siempre y cuando cumplan con las normas de seguridad establecidas.