Un grave hecho de violencia intrafamiliar ha conmocionado a la comunidad del condado de Polk, en Estados Unidos, luego de que un hombre asesinara a su esposa y dejara gravemente herida a su hijastra tras una discusión originada por un partido de la NFL.
¿Cómo ocurrió el hecho?
De acuerdo con información proporcionada por el alguacil del condado de Polk, el agresor, identificado como Jason Kinney, se encontraba en su vivienda observando un partido de fútbol americano junto a su familia.
En medio del encuentro deportivo, su esposa, Crystal Kinney, sugirió cambiar el canal, lo que habría desencadenado una discusión que rápidamente se tornó violenta.
Según el alguacil, ante el aumento de la agresividad, Crystal pidió a su hijo de 12 años que saliera de la casa para llamar al 9-1-1. El menor logró refugiarse en la vivienda de un vecino y, mientras huía, escuchó una detonación proveniente del interior del domicilio.
Confesión y suicidio del sospechoso
Tras el ataque, Jason Kinney huyó del lugar en su vehículo. Durante la fuga, se comunicó telefónicamente con su hermana, quien reside en el estado de Nueva York, y le confesó que había hecho “algo muy, muy malo”, asegurando además que no pensaba ir a prisión.
Las autoridades lograron rastrear al sospechoso hasta la vivienda de su padre. Una vez allí, el hombre se encerró en un cobertizo y posteriormente se quitó la vida con un disparo, según confirmaron las autoridades.
¿Qué pasó con las víctimas?
Los agentes confirmaron el fallecimiento de Crystal Kinney, quien presentaba una herida de bala en la cabeza.
Durante la inspección del lugar, también fue hallada una adolescente de 13 años, hijastra del agresor, con dos heridas de bala, una en el hombro y otra en el rostro. La menor fue trasladada de urgencia a una casa de salud, donde permanece en estado crítico.
En la vivienda también se encontraba un bebé de un año, hijo biológico de la pareja, quien resultó ileso, según el informe policial.