Tras meses de seguimiento, inteligencia y operaciones tácticas, la Policía Nacional del Ecuador logró la captura de 20 objetivos de alto valor (OAV) durante 2025, considerados cabecillas y operadores clave de algunas de las organizaciones criminales más peligrosas del país.
Entre enero y diciembre de este año, las acciones policiales permitieron golpear directamente a estructuras responsables de violencia, narcotráfico y economías criminales, con operativos desplegados en Manabí, Guayas, Esmeraldas, Sucumbíos y Orellana, así como en el extranjero.
Las intervenciones se ejecutaron de manera simultánea y estratégica, y estuvieron dirigidas contra integrantes de grupos de delincuencia organizada como Los Choneros, Tiguerones, Lobos, Águilas, Lagartos, Pepes y Comando de Fronteras, organizaciones que han tenido un rol protagónico en el escenario delictivo nacional.
Inteligencia, tecnología y cooperación internacional
Cada captura fue el resultado de meses de trabajo de inteligencia, que incluyó análisis de movimientos, identificación de rutas de escape, ubicación de escondites y uso de tecnología especializada. A esto se sumó el despliegue de unidades tácticas en zonas de alto riesgo y la cooperación internacional, factores que resultaron determinantes para el éxito de las operaciones.

Casos emblemáticos de 2025
Uno de los golpes más relevantes ocurrió el 26 de junio de 2025, en el cantón Montecristi, donde la Policía logró la recaptura de Adolfo M., alias “Fito”, cabecilla de Los Choneros. El delincuente fue hallado oculto en un búnker construido dentro de su vivienda, lo que representó un impacto directo a la estructura de mando de esa organización criminal.
Posteriormente, el 13 de septiembre, en la comunidad de Limonchicta, cantón Tena, unidades élite capturaron a Darío P., alias “Topo”, identificado como uno de los principales colaboradores y enlaces directos de alias “Fito”. Su detención debilitó aún más la capacidad operativa del grupo delictivo.
La ofensiva policial también trascendió las fronteras. El 2 de octubre de 2025, en Medellín, Colombia, un operativo encubierto permitió la captura de alias “Fede”, gracias al intercambio de información y al trabajo coordinado entre la Policía Nacional del Ecuador y la Policía Nacional de Colombia.
Finalmente, el 16 de noviembre de 2025, la Policía Nacional asestó otro golpe de alto impacto con la captura de Wilmer Chavarría, alias “Pipo”, uno de los delincuentes más buscados del país, quien había simulado su muerte en 2021. De acuerdo con las investigaciones, el criminal se sometió a cirugías estéticas para modificar su rostro, lo que le permitió evadir a la justicia durante casi cuatro años y seguir operando como autor intelectual de varios delitos.
Impacto en la seguridad
Según la Policía, la captura de estos Objetivos de Alto Valor ha tenido una incidencia directa en la reducción y afectación de delitos como delincuencia organizada, lavado de activos, terrorismo, secuestro, extorsión, sicariato, narcotráfico y tráfico de armas y municiones.
Las autoridades destacaron que estas acciones forman parte de una estrategia sostenida para debilitar las estructuras criminales y recuperar el control en territorios afectados por la violencia.

