La Agencia Metropolitana de Control (AMC), con apoyo de la Policía Nacional, clausuró un establecimiento dedicado a la venta de artículos de segunda mano que operaba junto a una mueblería en la parroquia Calderón, al norte de Quito. Durante el operativo se hallaron 68 radios de vehículos, de los cuales solo cinco contaban con documentación que respaldaba su procedencia legal.
El local, ubicado frente a un hospital, fue intervenido tras alertas ciudadanas que advertían sobre la presunta comercialización de artículos de dudosa procedencia. En la inspección también se encontraron parlantes, teléfonos inalámbricos y prendas de vestir, que fueron incautados por la Policía Nacional para las investigaciones correspondientes.

Moradores del sector denunciaron además que el establecimiento funcionaba los fines de semana como un “amanecedero”, con consumo de bebidas alcohólicas hasta altas horas de la madrugada, lo que generaba molestias y afectaciones a la convivencia barrial.
Edwin Chicaiza, líder zonal de la AMC en Calderón, informó que el responsable del local podría enfrentar una sanción de hasta 3.760 dólares por hacer mal uso de su permiso comercial, además de la clausura del negocio.

Según datos municipales, en lo que va de 2025 la AMC ha clausurado 11 establecimientos en Quito donde se detectaron objetos cuya procedencia no pudo ser justificada. Con estos operativos, el Municipio refuerza los controles a locales que operan fuera del comercio regular en la ciudad.


