El atleta extremo ruso Sergey Boytsov volvió a sorprender al mundo al liderar un desafío nunca antes visto: jugar un partido de fútbol a 1.800 metros de altura bajo un globo aerostático. La escena muestra una pequeña cancha suspendida por cuerdas mientras los deportistas disputan el balón en pleno aire.
Protección mínima y un reto viral
Aunque llevan paracaídas, las imágenes generan vértigo incluso para los amantes de la adrenalina. En uno de los clips, Boytsov celebra un gol con un “siu” en el aire, lo que hizo que el video se volviera viral en redes sociales por lo arriesgado y espectacular del momento.
Récords extremos en alturas
No es la primera vez que Boytsov desafía los límites. Antes logró otro récord mundial al realizar giros gimnásticos a 1.500 metros de altura bajo un globo aerostático, sin paracaídas ni equipo de seguridad.
“Sabía que si fallaba, era el fin”, confesó en su Instagram.
El ruso de 30 años, con más de 4 millones de seguidores, también ha practicado boxeo y ping pong a más de 2.400 metros de altura. Cada nuevo desafío confirma su obsesión por llevar el deporte —y la adrenalina— a escenarios imposibles.