La Policía Nacional confirmó este 17 de noviembre de 2025 la liberación de una joven de 18 años que había sido secuestrada la noche anterior en el distrito Nueva Prosperina, en Guayaquil.
El caso se registró el 16 de noviembre, cuando un grupo de ocho delincuentes irrumpió en una vivienda en la entrada de la 8 y se llevó a la víctima, exigiendo USD 100 000 para permitir su liberación.
De acuerdo con la información policial, la joven fue trasladada a una vivienda usada como centro de cautiverio.
En medio de la presión por el pago del rescate, los secuestradores contactaron a un familiar desde un número internacional.
Durante la videollamada, mostraron la mutilación de uno de sus dedos como método de intimidación, evidenciando la violencia con la que operaba el grupo delictivo.
La víctima fue encontrada por agentes de la Unase sentada en una silla y sujetada con una cadena.
Operativo policial y detenciones en Nueva Prosperina
La denuncia activó un despliegue inmediato de investigación. La Unase realizó un análisis de cámaras de seguridad, levantó información en territorio y organizó un operativo para ubicar a la joven.
La intervención concluyó con éxito en el mismo sector donde había ocurrido el secuestro.
Como resultado, dos adultos fueron detenidos y dos menores aislados, todos ecuatorianos sin antecedentes penales.
La Policía destacó que el rescate se realizó sin comprometer la vida de la víctima, quien actualmente recibe atención médica.
En el lugar se incautaron dos teléfonos que los captores usaban para coordinar el delito, lo que permitió frustrar el cobro del rescate.
La Unase, con presencia en Quito, Guayaquil y Manta, además de unidades móviles en todo el país, trabaja en casos de secuestro selectivo —dirigido a personas con capacidad económica— y secuestro exprés, que ocurre de forma aleatoria y bajo intimidación inmediata.
Recomendaciones para prevenir secuestros
Las autoridades exhortan a la ciudadanía a proteger su información personal, evitar responder llamadas sospechosas, no movilizar grandes sumas de dinero sin acompañamiento y variar las rutinas diarias para reducir riesgos.