En el Centro de Conservación de Especies de Aves Amenazadas del zoológico Pairi Daiza (Bélgica), nació el 21 de septiembre un ejemplar de guacamayo azul de Spix (Cyanopsitta spixii), especie originaria de Brasil y considerada extinta en estado salvaje desde hace 25 años. Este acontecimiento se produjo al primer huevo fértil luego de más de cien intentos sin éxito.
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El zoológico alberga doce de estos individuos como parte de un programa internacional de reproducción, en colaboración con el Instituto Chico Mendes (Brasil) y el zoológico de São Paulo. Desde su nacimiento, el polluelo es alimentado a mano cada dos horas y se encuentra en una fase crítica de desarrollo.
¿Qué es el guacamayo azul de Spix y por qué su nacimiento es tan especial?
El guacamayo azul de Spix es una especie endémica del noreste de Brasil que desapareció de su hábitat natural hace más de dos décadas. Su desaparición se debió principalmente a la destrucción del ambiente natural y al comercio ilegal de fauna. En 2019 fue clasificado por la UICN como extinto en estado silvestre.
El zoológico Pairi Daiza forma parte de un esfuerzo internacional para mantener y reintroducir esta especie a través de reproducción en cautiverio. Antes de este exitoso nacimiento, los ejemplares en el parque habían colocado más de cien huevos, pero ninguno resultó fértil; fue en el intento número 101 que finalmente un polluelo rompió el cascarón.
Desde su primer día, el avistamiento del polluelo ha sido reservado y su estado aún es delicado. Al nacer pesó unos 13 gramos, y en pocos días ya supera los 30 gramos, gracias a una alimentación manual cada dos horas.
¿Cuál será el rol del polluelo en el programa de conservación?
Este nuevo individuo no será liberado en la naturaleza inmediatamente, ya que se encuentra dentro de un proyecto de conservación que prioriza su supervivencia en cautiverio antes de pensar en reintroducción al hábitat salvaje. El objetivo es que este ejemplar actúe como reproductor dentro del programa, fortaleciendo la diversidad genética de la población cautiva.
El nacimiento es visto como un símbolo de esperanza para la especie, que ha sido objeto de muchos esfuerzos científicos y de conservación en Brasil y en el mundo. En las redes sociales del zoológico, se le describe como un “verdadero milagro vivo”.
