La tranquilidad de Olón, en la provincia de Santa Elena, se ha visto sacudida por un escándalo que involucra a un sacerdote y presuntas conductas inapropiadas con menores de edad. Un video viralizado en redes sociales este fin de semana ha encendido las alarmas, mientras la Fiscalía ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos.
PUBLICIDAD
El incidente, que se habría registrado la noche del pasado viernes, 15 de agosto, salió a la luz pública gracias a un video compartido en la red social X. En las imágenes, un grupo de vecinos confronta al párroco en su vivienda, tras haberlo visto ingresar con un menor de edad.
Según el relato de los ciudadanos, al tocar la puerta, se encontraron con un joven en ropa interior dentro de una de las habitaciones. “¿Pero qué hacía en bóxer el chico?”, se escucha cuestionar a uno de los grabadores en el video, mientras el sacerdote se defiende.
“Si quiere seguir lanzando la piedra, lance la piedra. En mi conciencia, yo no he hecho nada”, responde el religioso en el clip. La situación fue reportada de inmediato al ECU911, lo que llevó a la intervención de la Unidad Nacional de Investigación Contra la Integridad Sexual (UNICS).
El sacerdote se defiende: “Es una difamación”
En una entrevista para medios locales, el sacerdote identificado como Diego Sosa negó rotundamente las acusaciones, calificándolas de un “ataque” y una “calumnia” en su contra. Según su versión, los jóvenes, monaguillos de 15 y 16 años, se encontraban en su casa jugando PlayStation y se alistaban para asistir a un evento social.
Sosa también desmintió que los adolescentes estuvieran en ropa interior y afirmó que él vestía pantaloneta y camiseta en el momento de la llegada de los vecinos. El sacerdote asegura que, si la Policía o la Fiscalía hubieran encontrado algo, ya estaría bajo arresto.
Voces que piden justicia
El hecho ha generado una ola de reacciones en redes sociales.
PUBLICIDAD
La legisladora Viviana Veloz, presidenta de la Comisión de la Niñez, ya ha tomado cartas en el asunto, anunciando que este caso se incluirá en el proceso de fiscalización que su comisión inició hace un mes sobre la violencia sexual en el ámbito clerical. Veloz exige una acción “inmediata” por parte de la Fiscalía para esclarecer los hechos.
A raíz del escándalo, el sacerdote ha manifestado que se le ha solicitado que se aleje de la parroquia. Por el momento, tanto la diócesis local como la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) no se han pronunciado oficialmente sobre el caso.