Este lunes 14 de julio, el Gobierno Nacional anunció la instalación de tres plantas potabilizadoras portátiles en el sur de Quito como parte de la respuesta inmediata frente a la emergencia por desabastecimiento de agua potable que afecta a seis parroquias de la ciudad.
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La medida fue comunicada por la portavoz oficial del Gobierno, Carolina Jaramillo Garcés, quien explicó que esta acción se enmarca en un conjunto de anuncios impulsados por el presidente Daniel Noboa Azin. La ejecución estará a cargo del Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica, en coordinación con la Cruz Roja Ecuatoriana.
¿Dónde y cómo operarán las plantas?
Las plantas se instalarán en los barrios altos del sur de Quito en las próximas 48 horas. Se trata de un modelo Kit 5 y dos modelos Kit 3, capaces de producir hasta 11.000 litros por hora durante ocho horas de operación diaria, utilizando fuentes alternativas de captación. Se estima que en total producirán hasta 90.000 litros por día.
Los equipos incluyen sistemas completos de tratamiento: bombas de succión, filtros de arena y carbón, cloración y tanques de almacenamiento. Gracias a estas acciones, hasta 120.000 personas podrían beneficiarse a través de tanqueros y puntos de distribución comunitaria.
“Esta acción se suma a los esfuerzos interinstitucionales que el Gobierno Nacional ha emprendido para contener la emergencia, más allá de sus competencias directas, priorizando la salud y el bienestar de la ciudadanía”, destacó Jaramillo.
Desde el pasado 10 de julio, varios sectores del sur de Quito enfrentan una grave crisis de abastecimiento de agua potable, luego de que un deslizamiento de tierra afectara la captación Mica–Quito Sur. Como consecuencia, al menos seis parroquias han tenido interrupciones prolongadas en el suministro, generando preocupación entre los habitantes, especialmente en zonas altas donde el agua no llega con normalidad.
La Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (EPMAPS) activó un plan de contingencia con tanqueros, pero la alta demanda ha evidenciado la necesidad de acciones adicionales para garantizar el acceso al agua segura.