Un brutal crimen sacudió a la comunidad de Itaperuna, en el estado de Río de Janeiro, Brasil. Un adolescente de apenas 14 años, identificado como Camilo Aldebarán, confesó haber asesinado a su padre, madre y hermano de tres años el pasado 21 de junio de 2025, en un acto que ha generado repudio y debate en todo el país.
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De acuerdo con la Policía Civil, el detonante del triple homicidio habría sido la prohibición de sus padres para que el joven se reuniera en persona con su pareja virtual, una menor de 15 años con la que mantenía una relación a distancia por internet. Las autoridades confirmaron que recuperaron grabaciones de llamadas entre ambos, en las que la adolescente lo instigaba a ejecutar el crimen.
Según las investigaciones, Camilo llevaba aproximadamente seis años en contacto con la menor, desde que tenían 9 y 8 años respectivamente. Se conocieron a través de un videojuego en línea y mantenían una comunicación constante desde entonces. La relación virtual, que fue evolucionando con el tiempo, habría pasado de la amistad a un vínculo emocional profundo, marcado por la dependencia y la manipulación.
Camilo utilizó el arma de su padre, un agente de seguridad privada, para cometer los asesinatos en su propio hogar. El menor fue detenido horas después, cuando intentaba ocultar evidencias del hecho.
El jefe de la Policía Civil, Carlos Augusto Guimarães, brindó detalles escalofriantes sobre las conversaciones encontradas en el teléfono del menor. “Vimos mensajes sobre descuartizar los cuerpos, quemarlos o incluso dárselos de comer a los cerdos. Un total desprecio por la vida humana”, indicó. Las autoridades calificaron las conversaciones como “perturbadoras y siniestras”, destacando el grado de planeación y la falta de empatía de ambos menores.
Todo el problema tuvo su origen, al parecer, en una invitación que le hizo la menor al niño para que se conocieran en persona. Según el agente, la adolescente le habría dicho: “si me amas, sé un hombre”, presionando emocionalmente al menor a deshacerse de su familia. En los chats, también se discutía la posibilidad de cometer un crimen similar contra los padres de la menor, aunque afortunadamente, esto nunca se concretó.
La Policía confirmó que la joven ya fue localizada y se encuentra bajo custodia. Está siendo investigada por presunta coautoría en el crimen y por inducción al homicidio.
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Las autoridades han hecho un llamado a padres, tutores y educadores para fortalecer la comunicación con adolescentes y supervisar sus interacciones en línea.
Mientras tanto, el menor permanece recluido en una unidad socioeducativa y se espera que en los próximos días la Fiscalía determine las medidas judiciales que se aplicarán tanto a él como a su cómplice.
