Una fuerte explosión sacudió anoche la concurrida zona comercial de La Bahía en Guayaquil, un sector donde los comerciantes han denunciado de forma recurrente ser víctimas de amenazas y extorsiones por parte de grupos criminales. El incidente afectó a al menos cuatro pequeños locales, causando alarma entre la ciudadanía y poniendo de manifiesto la creciente preocupación por la seguridad en la urbe.
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Videos que circulan en redes sociales muestran la magnitud del impacto, evidenciando los daños materiales en los establecimientos. La Policía Nacional ha iniciado de inmediato las investigaciones para determinar las causas exactas de esta explosión, que se produce en un contexto de escalada de intimidaciones a los comerciantes.
Extorsiones: El Calvario de los Comerciantes de La Bahía
En las últimas semanas, los vendedores de La Bahía han reportado un incremento en la recepción de panfletos y mensajes amenazantes. Estos documentos, atribuidos a grupos delictivos, exigen una “colaboración” económica para que los comerciantes puedan “trabajar tranquilos”. La negativa a ceder a estas demandas ha sido, en muchas ocasiones, el detonante de actos violentos y amedrentamientos.
Ministro del Interior Llama a la Denuncia Anónima
Ante esta grave situación, el ministro del Interior, John Reimberg, se pronunció hoy, miércoles, enfatizando la importancia de la colaboración ciudadana. Reimberg confirmó que se han desplegado equipos especializados de la Policía para investigar las denuncias. Sin embargo, lamentó la reticencia de algunos comerciantes a proporcionar información crucial por temor a represalias.
“Cuando vamos no nos quieren entregar la información. Ya supimos que les habían mandado mensajes extorsivos que no quisieron compartirlo con nosotros”, declaró el ministro en Teleamazonas, subrayando que obtener datos como números de cuenta bancaria o de WhatsApp es fundamental para identificar a los responsables.
Reimberg informó que en la madrugada de hoy se ordenó a los equipos especializados regresar a las zonas afectadas para dialogar nuevamente con los comerciantes, reiterándoles la garantía de anonimato en sus denuncias. “Cada caso extorsivo donde la gente nos ha compartido información, han sido casos exitosos para la Policía Nacional porque hemos dado con todos los responsables”, afirmó, al tiempo que reconoció el miedo que experimentan las víctimas.
El ministro hizo un llamado enfático a utilizar las líneas telefónicas anónimas dispuestas para las denuncias, asegurando que la información recibida ha permitido la aprehensión de delincuentes. No obstante, lamentó que, en ocasiones, el sistema judicial no siempre acompaña el esfuerzo policial, dejando en libertad a los infractores.
