Olivia Farnsworth, es una niña de 12 años que vive en Huddersfield, Inglaterra. La adolescente tiene una condición médica que ha desconcertado a personas en todo el mundo, Olivia no siente dolor físico, no experimenta hambre y puede pasar días sin dormir. Su caso es tan raro que ha sido catalogado como único en el planeta.
PUBLICIDAD
La causa de este fenómeno es una deleción del cromosoma 6, un tipo de alteración genética que afecta funciones vitales del organismo. Aunque se han documentado otros casos con alguno de estos síntomas por separado, Olivia es la única paciente que reúne los tres.
Un accidente que reveló su condición
El caso de Olivia se volvió conocido luego de un accidente que parecía grave, pero que ella superó con aparente tranquilidad. A los siete años fue atropellada por un auto y arrastrada varios metros. A pesar de las lesiones visibles, se levantó como si nada hubiese ocurrido: no lloró, no se quejó y no pidió ayuda.
Los médicos confirmaron que tenía marcas de neumáticos en el pecho, heridas y quemaduras, pero su cuerpo no reaccionó ante el dolor, una señal básica del sistema nervioso. Fue entonces cuando los especialistas comenzaron a investigar más a fondo su caso.

Una rutina bajo vigilancia
Olivia tampoco siente hambre, lo que representa un riesgo para su salud, ya que puede pasar largos periodos sin alimentarse. Además, rara vez muestra signos de cansancio o necesidad de dormir. Esta triple anomalía ha obligado a su familia a seguir rutinas estrictas para garantizar que se alimente y descanse, aunque ella no lo necesite por instinto.
El caso ha sido estudiado por genetistas, neurólogos y pediatras que coinciden en que se trata de un fenómeno médico sin precedentes. La deleción del cromosoma 6 es poco común, pero los médicos jamás habían documentado una combinación tan radical de síntomas.
Aunque Olivia lleva una vida escolar normal, necesita constante supervisión. Su historia representa un desafío, pero también una esperanza para el avance de la medicina genética.