La Resolución JPRF-F-2024-0120 de la Junta de Política y Regulación Financiera, establece que los clientes con deudas vencidas en bancos públicos, privados y cooperativas vencidos entre el 10 de agosto de 2023 y el 30 de agosto de 2024 podrán regularizar sus obligaciones vencidas mediante un refinanciamiento o una reestructuración de su crédito para ponerse al día.
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Es opcional para las entidades financieras, por lo que cada institución financiera evaluará las solicitudes de sus clientes caso por caso, determinando las condiciones y la posibilidad de otorgar períodos de gracia. No cobrarán gastos de cobranza, costos legales y tarifas.
Para el refinanciamiento o reestructuración de créditos, se podrá efectuar la consolidación de todas las operaciones de crédito que el sujeto de crédito mantenga con la entidad al momento de instrumentar la operación, de común acuerdo entre las partes.
La resolución permite la reestructuración de la deuda, lo que puede incluir la modificación de términos y condiciones del préstamo, como la extensión del plazo o la reducción de intereses.
En caso de que el cliente vuelva a incurrir en impagos, la deuda es declarada como cartera castigada.
Los deudores deben negociar directamente con las entidades financieras para acordar los nuevos términos de pago. Una vez alcanzado un acuerdo, debe formalizarse a través de un documento que refleje los nuevos términos de la deuda.
Las entidades reguladoras supervisarán el cumplimiento de la resolución y se asegurarán de que los bancos y cooperativas implementen el mecanismo de manera adecuada. En caso de desacuerdos, se establecen procedimientos para la resolución de conflictos entre deudores y entidades financieras.
Este nuevo mecanismo tiene como objetivo brindar un alivio a los deudores y fomentar la regularización de deudas, al mismo tiempo que asegura la transparencia y equidad en el proceso de negociación y pago.
