Una jueza de Ecuador suspendió cautelarmente el traslado que las autoridades ecuatorianas habían previsto realizar este martes de un grupo de 60 presas que se encontraban en una cárcel donde también están recluidos hombres a otra prisión exclusivamente de mujeres.
PUBLICIDAD
Las reclusas se encontraban en la cárcel mixta de la sureña ciudad de Loja, capital de la homónima provincia, e iban a ser trasladadas a la prisión de mujeres de Zaruma, en la vecina provincia de El Oro.
La magistrada Martha Jaramillo, de la Unidad Judicial Civil de Loja, suspendió temporalmente el traslado hasta verificar los informes realizados por el Servicio Nacional de Atención Integral (SNAI) a Personas Privadas de Libertad, la unidad penitenciaria estatal a cargo del control interno de las cárceles ecuatorianas.
Recomendados
‘Cow Cat’, en contra del abuso y la tortura de gatos en China
Landy Párraga no era la única propietaria de la importadora que Fiscalía quería investigar
La comunidad Waorani, clave para hallar a los cuerpos faltantes de accidente en Tiwina, Pastaza
En concreto, la jueza reclamó los informes técnicos de las medidas tomadas para el traslado y los documentos que acrediten la necesidad del mismo sobre las presas que plantearon la acción de amparo, de acuerdo con la resolución judicial difundida en redes sociales por el colectivo SOS Cárceles Ecuador.
De acuerdo con ese documento, entre los argumentos de las presas para negarse al traslado es que algunas son madres y parientes de personas con enfermedades catastróficas y que se les privaría del derecho de visita.
También refirieron que las recluidas en el pabellón de mujeres de la cárcel de Loja siempre han colaborado con las autoridades para una convivencia pacífica.
Mientras, el SNAI indicó este martes en un comunicado que acató la orden de la jueza “hasta que se resuelva la acción judicial”.
Asimismo, argumentó que el traslado se realizaba “en estricto cumplimiento a las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)” que, a inicios de 2022, realizó un informe sobre la situación en el sistema penitenciario de Ecuador ante la serie de masacres entre bandas rivales que desde 2020 ha dejado más de 400 presos asesinados.
El SNAI también refirió que el traslado se iba a dar con “una debida planificación y coordinación interinstitucional, con el fin de incorporar una perspectiva de género y tratamiento diferenciado para proteger a las mujeres de ser víctimas de diversas formas de violencia”.
La unidad penitenciaria sostuvo que su traslado a una cárcel exclusiva de mujeres permitirá asegurar que vida e integridad no se encuentren en riesgo.
Con información de EFE