La Sala Penal de la Corte provincial de Justicia de Pichincha negó el pedido de hábeas corpus interpuesto por la defensa del asesino confeso de la enfermera de 33 años, Letty Cando. Por unanimidad, los jueces calificaron de improcedente a esta acción constitucional.
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Ante eso, Johnny C., seguirá cumpliendo prisión preventiva mientras continúa la investigación. La defensa del sujeto no pudo justificar la detención ilegítima o arbitraria del procesado por parte de Fiscalía.
Según informó la Fiscalía, la pretensión de la Defensora Pública, que representó al accionante, buscaba convencer a los jueces que antes de la audiencia de formulación de cargos, Johnny Stalyn C. A. estuvo detenido arbitraria e ilegítimamente, al supuestamente haber estado privado de su libertad por más de 24 horas. Ante eso se respondió que no se vulneraron los derechos y que la Institución actuó conforme a las atribuciones que le confiere la Ley.
Sobre la supuesta enfermedad mental que padece Johnny Stalyn C. A. –con la que se pretendía también justificar una detención ilegal- se informó que dentro del expediente existe una pericia del Hospital Psiquiátrico Julio Endara que certifica una buena salud mental del procesado.
De hecho, la Corte ofició “por deslealtad procesal y mala fe” a uno de los abogados, para que la Judicatura investigue su actuación. La instrucción fiscal continuará por 90 días.
Letty Cando fue reportada como desaparecida el 3 de septiembre cuando salió a una fiesta con su amiga y no regresó.
Se conoció que ella se quedó dormida en la casa de Johnny C., y este abusó sexualmente de ella, luego la asesinó y desmembró su cuerpo para enterrarla en una zona boscosa del Parque Metropolitano Guanguiltagua, cerca de su residencia.
