Padecer una fobia no es ningún juego, más aún cuando sientes que tu vida puede estar en peligro. Imagínate tener un miedo incontrolable a las alturas y en pleno vuelo de avión este comience a presentar turbulencias que ponga en jaque tu estabilidad mental, esto fue lo que vivió el doctor del Guayaquil City Douglas Bailón el pasado sábado 05 de agosto.
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Fue en el vuelo que conecta Guayaquil con Quito donde la delegación del equipo de la Ciudad experimentó este hecho (turbulencia). A poco más de 5 minutos de aterrizar en la capital, los pasajeros experimentaron este fenómeno que sacó gritos y dibujó terror en cada uno de los ocupantes.
El equipo de Metro Ecuador, que regresaba de la cobertura de la Comic Con, fue testigo de este hecho y pudo experimentar el atemorizante momento. En uno de los videos del hecho se escucha a Bailón gritar producto de su terror.
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Momento que el doctor del Guayaquil City, Douglas Bailón, experimentó una turbulencia en pleno vuelo a Quito. El galeno tiene fobia a las alturas.
— Metro Ecuador (@MetroEcuador) August 6, 2023
Video: Diego Arévalo pic.twitter.com/97OzJVWzgJ
“Yo tengo fobia a las alturas y siempre sufro en los vuelos. Pero este literal fue el peor. Hubo un par por ahí que dijeron tranquilo. Cuando uno tiene una fobia es imposible”, contó a este medio después de aterrizar en el aeropuerto Mariscal Sucre.
Algo sorpresivo del momento es que durante el vuelo, de poco más de 30 minutos, la nave no habría alcanzado los 10 pies de altura. Asimismo, el galeno que padece fobia a las alturas viajó solo en su fila por lo que su desesperación no pudo ser calmada por un cercano.
Detalles de las turbulencias
Indicar que las turbulencias también suponen una mayor amenaza para los aviones pequeños, que son más susceptibles a los cambios de velocidad del viento, que para los aviones comerciales de mayor tamaño.
Estos hechos pueden zarandear a los pasajeros y miembros de la tripulación por lo que puede detonar en lesiones si llegan a ser de alta magnitud.
Varios expertos insistieron en que permanecer sentado y llevar puesto el cinturón de seguridad en la medida de lo posible durante los vuelos eran las mejores formas de reducir los riesgos.