Este 2 de mayo, el Metro de Quito brindó un servicio normal, en las franjas horarias establecidas, en la mañana de 07:00 a 10:00 y, en la tarde, de 16:40 a 19:30, en las estaciones El Labrador, Iñaquito, Carolina, Ejido, San Francisco, Magdalena, Recreo, Solanda, Morán Valverde y Quitumbe.
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Uno de los beneficios más nombrados por los usuarios fue el ahorro de tiempo en los viajes que sirvieron para trasladarse a los trabajos, a los domicilios, hacer gestiones o por turismo, para conectarse, en un recorrido de 34 minutos. En la estación San Francisco, a las 16:30 y de forma ordenada se permitió el ingreso para abordar los trenes hacia el norte o el sur de la ciudad; cumpliendo el horario, el primero de la tarde partió a las 16:40.
Esta tarde, la Empresa Pública Metropolitana Metro de Quito, con su compromiso de garantizar una experiencia de calidad, emitió un comunicado en el que indica que tras una evaluación de la prestación del servicio con cobro, en la jornada matutina, el personal técnico operativo se encuentra trabajando de forma activa en: ajuste del servicio de software para impresión de código QR, en menor tiempo posible; incremento de personal en taquillas; códigos QR preimpresos para agilizar la entrega.
Alrededor de cinco mil personas llegaron a la estación Quitumbe (sur de Quito) a la que le faltó boleterías, según el Alcalde saliente, Santiago Guarderas. “Esto lo hemos hablado inmediatamente con la empresa operadora, el día de hoy mismo se va a corregir, se están analizando una serie de alternativas para que podamos prestar una mejor atención a la ciudadanía”.
Para hoy en la tarde ya se prevén los correctivos y a partir de mañana se espera ampliar la posibilidad que mayores ciudadanos puedan utilizar este sistema.
En las otras estaciones, lo que es Labrador, Iñaquito, y en las intermedias, San Francisco, en El Ejido, no estuvieron tan llenas. Ello demuestra, según el Burgomaestre, en las horas de la tarde en cambio, vamos a tener una aglomeración en las estaciones del norte que van hacia el sur.
Por otro lado, en un comunicado del Metro de Quito se detalla que en la estación Quitumbe, la demanda de usuarios triplicó el promedio que se venía movilizando diariamente. El tiempo programado para la impresión de pases con códigos QR estaba previsto para una afluencia mucho menor. Por esta razón se dieron aglomeraciones que causaron la molestia de los usuarios.
“No se presentaron ningún tipo de desmanes o acciones vandálicas como se ha señalado en publicaciones de redes sociales”, cierra la misiva.
