El tiroteo registrado en la madrugada de este 11 de enero, dentro de las instalaciones de la clínica Omni Hospital de Guayaquil, motivó al reforzamiento de las seguridades y, pese a lo ocurrido, el personal labora con absoluta normalidad.
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En un comunicado se indicó que, como hospital “cumplimos los protocolos de seguridad, que lamentablemente fueron vulnerados por la violencia armada de personas que irrumpieron en grupo por la fuerza a nuestras instalaciones sometiendo al personal de guardia y de salud”.
Añade el comunicado que de inmediato se activó el protocolo, contactando inmediatamente al 911, desplazándose la Policía Nacional a las instalaciones del hospital, tomando el control, precautelando la seguridad de los pacientes y del personas sanitario.
“Las condiciones de inseguridad en general y la ocurrencia de estos hechos nos han obligado a reforzar nuestros sistemas, para brindar mayor seguridad a los pacientes y personal que labora en el hospital”, sostiene la casa de salud.
Añade que el Fideicomiso Titularización Omni Hospital está obligado por la Constitución, Ley Orgánica de Salud y la Ley de Derechos y Amparo al Paciente a dar atención a toda personas en condición de emergencia. “Hemos colaborado con las autoridades e informamos que estamos laborando con normalidad en todas nuestras áreas y sedes”, concluyó el comunicado.
En la madrugada en mención, se reggistró un tiroteo entre dos grupos armados, uno de los cuales ingresó por la fuerza, con la intención de asesinar a un paciente, quien estaba internado tras recibir el pasado viernes 6 de enero un disparo que lo dejó herido. Sobre el tiroteo, se conoció que la Policía capturó a dos de los presuntos responsables.
