Otro acto de un uniformado que conmociona al país. Ahora se trata de un Mayor de la Policía que está involucrado en el presunto delito de violación a una joven de 19 años y abuso sexual a una estudiante menor de edad (17 años). Eso no es todo, su esposa también ha sido procesada, pero está fuera del país.
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Contra el mayor de Policía Walter León C. R se dictó prisión preventiva, mientras que para su esposa, Katerine Stefanny B. C., –debido a que esta fuera del país– se dispuso medidas alternativas como presentación periódica dos días a la semana en el consulado más cercano en Houston, Estados Unidos.
Los hechos ocurrieron entre la noche del 29 y la madrugada del 30 de octubre de 2022 en la casa de la pareja, ubicada en el sector de Huachi Loreto, en el barrio Miñarica 2.
Katerine Stefanny B. C. enseñaba y ofertaba clases para arreglar las uñas en su estética. La noche del 29 con motivo de celebrar el fin del curso habían organizado una reunión para la cual se pidió 15 dólares como cuota para la comida y bebida.
Además, se habría solicitado que lleven complejo B, vitamina C y jeringuillas para recibir una clase de primeros auxilios e inyectología que la dictó Walter León C. R.
Walter se presentó como miembro activo de la Policía Nacional en el grado de mayor y como jefe de Criminalística en Esmeraldas. Incluso portaba las insignias y el escudo de la institución.
Ya llegando la noche hicieron la cena, jugaron cartas, bailaron y tomaron. Cuando el tequila se terminó, el procesado brindó a las jóvenes un licor de dudosa procedencia de color café y rosado.
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Según la investigación, las señoritas estaban conscientes hasta la ingesta de esa bebida. Luego perdieron la conciencia.
Llegó la madrugada del 30 de octubre, tras la fiesta varias de las estudiantes se quedaron en la parte de abajo del domicilio, pero habrían llevado a la agraviada y a otra presunta víctima de 17 años, las menores del grupo a la habitación de su hija menor.
Fue ahí, Walter León C. R. habría violado a la joven de 19 años, mientras Katerine Stefanny B. C, su esposa, observaba. Después se unió a la consumación del delito.
Los procesados tenían a la adolescente de 17 años en la misma cama y al mismo tiempo habrían abusado de ella. Cuando las dos despertaron, no tenían movilidad en su cuerpo, por lo que fueron agredidas sexualmente hasta el amanecer, de acuerdo a la Fiscalía.
Al salir de esa casa fueron a diferentes casas de salud para que les practicaran los respectivos exámenes, con los resultados se derivó la apertura de dos investigaciones: una por violación y otra por abuso sexual.
