La embarcación privada, ‘Albatros’, que transportaba 2.000 galones de diésel se hundió a las 04:30 de este sábado sin dejar víctimas. Sin embargo, el combustible ha caído en el mar debido al impacto. Por ello se activó un plan de contingencia ante una posible emergencia ambiental.
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El Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica tomó acciones inmediatas para reducir los impactos de este siniestro en los ecosistemas marino-costeros.
En un comunicado se detalló que en la zona primaria del siniestro se colocaron barreras de contención y paños absorbentes para aislar el combustible que libera la embarcación hundida.
Al confirmarse que existe presencia de una mancha superficial de combustible en varios puntos de la bahía, se suspendió temporalmente las actividades acuáticas en algunos sitios de visita cercanos.
Varios grupos de guardaparques lideran las operaciones para la aplicación de dispersante biodegradable en las zonas afectadas. Paralelamente, se ha notificado al armador de la nave la activación del plan de contingencia y se continuará los procesos derivados en apego a la normativa ambiental vigente.
La embarcación accidentada sin camarotes ni mayores comodidades, fueron rescatados cuatro tripulantes, cumplía viajes diarios y tenía una capacidad para unas 12 a 15 personas.
Galápagos es un archipiélago en medio del océano Pacífico, a unos mil kilómetros de la costa ecuatoriana, identificado como polo de atracción del turismo ecológico mundial.
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Fue declarado Patrimonio Natural de la Humanidad en 1979, en atención a sus especies terrestres y marinas, tanto animales como vegetales, que sirvieron al científico inglés Charles Darwin para elaborar la teoría de la evolución de las especies.
Pronunciamiento de Petroecuador
Petroecuador, de su lado, informó que activó un plan de contingencia y entregó dos tramos de barreras de contención, para rodear la embarcación y mitigar los efectos del naufragio. Al momento, se realizan todas las acciones para apoyar en este incidente.
También dispuso como medida preventiva, realizar un control adicional a todas las embarcaciones que se acerquen a proveerse combustible.
