Moradores de la Comuna, tras el aluvión del 31 de enero e 2022 han manifestado su preocupación por seguir en el sector. Un día después de la tragedia, Fernando Olivo comentó que con su esposa han decidido que desalojarán su casa. “La vamos a cerrar, hasta conseguir otro lugar estamos donde mi hermana”, dijo.
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Las autoridades pusieron en marcha un Plan de Rehabilitación y Reactivación de la zona afectada por el aluvión, que lo impulsa la Alcaldía de Quito. El objetivo es recuperar las condiciones organizativas, socioeconómicas y de infraestructura de los sectores de: La Comuna de Santa Clara de San Millán, La Gasca, La Colón, Santa Clara, La Mariscal y Pambachupa; a través de la coordinación interinstitucional, que incluye a actores del sector privado.
La ingeniera Verónica Miranda, expresidenta del Cuerpo de Ingenieros Civiles de Pichincha, mencionó que es importante realizar una evaluación real de las causas de estos daños.
“Hay que revisar las estructuras de protección, de conducción y todas las quebradas, sus laderas, en qué situación se encuentran porque además de la posibilidad de una fuerte precipitación pudieron haberse ocasionado derrumbes, deslaves laterales de las mismas quebradas por varias causas que hay que analizarlas para que se tomen las medidas correctivas. Cuando se conoce la causa se puede dar solución para que esto no vuelva a ocurrir porque no es un problema que apareció hoy”, explica Miranda.
La urbanización
Miranda también menciona que se visualizan varios proyectos urbanísticos tanto formales como informales en Quito y han ido ocupando lugares que son de alto riesgo, ya que Quito está ubicado en una zona sísmica.
“Con el crecimiento de la ciudad, se van haciendo casas y la urbanización impermeabiliza la superficie lo que no permite que se filtre el agua y tiene que irse a las zonas de escorrentía, que ya no son las naturales como las quebradas. Si esto se impermeabiliza la cuantía de líquidos y lodos aumenta. Estos sistemas podrían llegar a superar su cálculo de conducción” , manifiesta la ingeniera.
La Municipalidad y otras instituciones del Estado invertirán cerca de 8,5 millones de dólares, en la rehabilitación y recuperación de la zona afectada. Las propuestas entre otras son: un Plan de Intervención sanitaria; solución inmediata de arrendamiento de las viviendas; construcción colectiva para recuperación del espacio; organización de mingas, con el fin de mejorar fachadas; bono de contingencia para personas afectadas; análisis de la exoneración de impuesto predial; apoyo en salud mental y psicosocial; medios de vida y productividad; plan de mitigación de riesgo y reacción ante nuevos eventos; y fortalecimiento al Sistema de Alarma Temprana, a través de cooperación internacional y asesoría técnica especializada.
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Verónica Miranda enfatiza la importancia de las evaluaciones estructurales para saber cuánto han sido afectadas y cómo están cimentadas, si pueden mantenerse a lo largo del tiempo. Además monitorear las laderas y quebradas. Especialmente las que tienen mayor pendiente.
Cerca de 8.5 millones de dólares es el monto que el Municipio de Quito invertirá en el Plan de Rehabilitación, Reactivación y Recuperación de la afectación por aluvión de la quebrada El Tejado, desastre natural que enlutó a los quiteños el pasado 31 de enero de 2022.
El asesor de la Alcaldía, Hugo Yepes, explicó gráficamente la magnitud del desastre natural: “La quebrada nace a los 4000 metros y termina a los 2900, la pendiente es muy grande y cualquier cosa que se suelta arriba tiene alta probabilidad de llegar abajo”. Expuso que la intensa lluvia generó un deslizamiento y provocó una avalancha de lodo y escombros que superó, en cuatro veces, a los muros de tres metros altura que se encuentran en la quebrada para prevenir este tipo de afectaciones.
