Durante un enlace radial el presidente Guillermo Lasso garantizó que no habrá confinamiento en el Ecuador ante el incremento de contagios por la covid-19. El mandatario apuntó que la ómicron es una gripe fuerte y que la tasa de mortalidad es baja.

A la par, señaló que deben preocuparse por la salud física y emocional. “Yo les garantizo que no habrá confinamiento. Tendremos que saber vivir con esta realidad”.

“Estamos viendo los resultados; es una molestia contagiarse con la variante ómicron, pero es como una gripe fuerte, porque mientras en el 2021 llegábamos a 43 fallecidos cada mil contagiados, hoy no se llega ni siquiera a uno… estamos frente a una variante controlable que no está llevando ni siquiera a saturar los hospitales”, añadió el primer mandatario Lasso.

“No solamente tenemos que preocuparnos de que la salud física, biológica no sufra, también nos tenemos que preocupar de que la economía no sufra... y por la libertad que todos quieren sentir de salir a trabajar, mandar a sus hijos a estudiar, para que los jóvenes vayan a la universidad”, aseguró.

A la par, confesó que el gobierno está haciendo un nuevo pedido de vacunas a China para así inmunizar los infantes.

Nueva ola

Con la nueva ola se dispararon los contagios desde unos 4.000, registrados en Navidad, hasta más de 42.000 en la segunda semana de enero. Mientras tanto, alrededor del 82% de la población mayor de cinco años ya recibió las dos dosis de la vacuna contra el COVID-19 —unos 13,1 millones de personas— y la tercera un 13% del total de la población. Desde mediados de febrero el gobierno espera vacunar a niños de tres a cinco años. Ecuador tiene 17,3 millones de habitantes.

Para reducir la oleada de contagios, el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) ya ha reducido a niveles de 50 a 60% las actividades en restaurantes, salas de cine y ha prohibido todo tipo de concentraciones públicas o privadas.