El Gobierno de Sudáfrica consideró hoy «apresuradas» las medidas ya adoptadas o en debate en muchos países europeos para suspender vuelos desde el sur de África. Estas medidas llegan tras la detección de una nueva variante del coronavirus (B.1.1.529) con múltiples mutaciones.
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Los primeros países en anunciar restricciones fueron el Reino Unido e Israel, en tan solo cuestión de horas después del anuncio de la detección de la variante.
El mercado británico es especialmente importante para la economía sudafricana. Así, el Ministerio de Relaciones Internacionales y Cooperación emitió un comunicado indicando la posición de Sudáfrica.
Dijo que «respeta el derecho de todos los países a tomar las medidas de precaución, pero considera «apresurada» la decisión de Reino Unido.
Poco después, sin embargo, países como Alemania o Italia anunciaban también restricciones.
Otros países europeos se suman
«Es apresurado, absolutamente», recalcó a Efe Clayson Monyela, portavoz del Ministerio de Relaciones Internacionales y Cooperación, en respuesta a esos nuevos anuncios.
Monyela también aseveró que Sudáfrica va a «dialogar con todos los países» para que reconsideren estas medidas.
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Este viernes, otros países europeos se sumaron a la adopción de medidas.
Francia, Alemania, Austria, Países Bajos son algunos de los países que sumaron su preocupación por la variante Sudafricana.
El descubrimiento de esta nueva variante, identificada como B.1.1.529, fue anunciado este jueves por científicos y autoridades sanitarias de Sudáfrica.
Se caracteriza por presentar múltiples mutaciones (algo más de una treintena) que despiertan la preocupación de los especialistas. Los principales inconvenientes son su transmisibilidad y potencial capacidad de evadir la inmunidad o protección previa.
