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Un solo día de paro nacional le restaría cerca de USD 200 millones a la economía ecuatoriana

Son millonarias las pérdidas que las paralizaciones causan a la economía ecuatoriana, por la afectación a los sectores comerciales, productivos y de transporte principalmente.

Algunos productores arroceros han anunciado que no se sumarán al paro nacional.

Tomando como referencia las cifras del Banco Central del Ecuador (BCE) un día de paro nacional, a escala del de octubre 2019, le costaría al Ecuador: USD 28 millones menos para el Comercio; USD 63 millones menos por ingresos no percibidos por falta de ventas, USD 42 millones menos por pérdidas para el sector productivo, USD 7 millones menos para el sector turístico y 6,9 millones menos para el sector del transporte.

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Además, hay gastos para el Estado producto de los daños a infraestructuras que dejan las manifestaciones. Por ejemplo, en octubre de 2019 al Ecuador le costó USD 48,63 millones los daños y pérdidas que se registraron en esos 11 días de paralizaciones en las vías y sitios públicos. Y en ese mismo lapso el sector servicios perdió USD 66,89 millones y otros USD 39,94 millones destinó el país a cubrir gastos de emergencia.

El economista Marcos Ubilla, quien ha sido asesor económico del sector público, explica que si tomamos como referencia las cifras que dejó el paro de octubre 2019 “podemos estimar cuánto pierde el Ecuador por las paralizaciones”. “Más allá del tema político no le conviene al Ecuador por ningún lado paralizar las actividades producticas, comerciales, de transporte, industriales y demás. En un solo día de paro hay millones de dólares que se pierden y que nunca se recuperan”, dice Ubilla.

Francisco Jarrín, presidente de la Cámara de Industrias de Guayaquil, comparte sobre cuánto se perdería en el país por un solo día de paralizaciones, “es algo difícil de establecer, porque en los momentos actuales cualquier evento como el de octubre de 2019 no solo implicaría la pérdida en ventas (que podría bordear los USD 175 millones por día), sino que generaría problemas y costos adicionales para las empresas y negocios, que impactarían directamente en su capacidad presupuestaria, afectando compras a proveedores, y contrataciones de personal”.

El presidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil, Miguel Ángel González, confirma que $28 millones diarios pierde el comercio por las paralizaciones nacionales.

“El sector más afectado es el comercio al por menor de alimentos y bebidas. Dentro de estos tenemos a los supermercados, tiendas de barrio y pequeños negocios que ofrecen varios otros tipos de productos, como prendas de vestir, muebles, aparatos, artículos de ferretería, cosméticos, entre otros. Estos se ven afectados dado que el día uno del paro hay menos afluencia de personas, pero el día dos algunos cierran sus puertas temprano para evitar quedar envuelto en el conflicto”, comparte González.

Vandalismo, un efecto negativo de las paralizaciones

A nivel micro, los pequeños comerciantes no solo temen a la paralización nacional en las carreteras, el mayor temor de ellos son los actos de bandalismos que se dan producto del paro.

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Es el caso de Karym Hernández, propietaria del restaurante Mono’s Rock, ubicado en el suroeste de Guayaquil. Cuenta que su local tiene menos de un año y hasta ahora han podido mantenerse, pero teme que el paro o manifestaciones interrumpan sus actividades.

“Los emprendedores somos los que más nos vemos afectados, porque tenemos que cerrar los negocios para evitar el robo, nosotros vivimos del día a día. De hecho, este último mes -debido a la delincuencia- no estamos ganando, porque las personas evitan salir de casa. También ha bajado el delivery por el temor a los motorizados”, comparte.

Un sentimiento similar tiene Paula Pérez, dueña de la marca de cosméticos 360 Hair. Comparte que hoy decidió no enviar su producto a cantones allegados a Guayaquil por el temor de los saqueos en las carreteras. “Solo hoy estimo haber perdido unos 300 dólares, considerando que ya tenía pagado el transporte, porque yo vendo mi producto fuera de Guayaquil, en Daule, Nobol y Durán, pero por el temor del cierre de vías, no me movilicé”, comparte con tristeza la microempresaria.

En los grandes empresarios el sentimiento es el mismo y las peticiones coinciden en que la economía ecuatoriana necesita seguir creciendo.

¿Cuál es la situación actual?

Según el BCE, resultados de las Cuentas Nacionales Trimestrales muestran que, al segundo trimestre del año 2021, la economía nacional creció en 8,4% respecto al mismo período de 2020.

Respecto a los componentes del Producto Interno Bruto (PIB), el consumo de los hogares creció en 10,5% lo que muestra una recuperación considerable luego de siete trimestres consecutivos de contracción. Además, el consumo del Gobierno General creció en 3,3% con relación al segundo trimestre de 2020, explicado por un aumento en los servicios de salud; y las exportaciones crecieron en 16%, debido al crecimiento de las ventas de petróleo, camarón y flores.

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