Son buenos momentos para los fans de Star Wars con los estrenos simultaneos cada miércoles de The Mandalorian y la serie animada Bad Batch. En particular la primera continua maravillando a los fanáticos con las aventuras que atraviesan en esta entregan los queridos Din Djarin (Pedro Pascal) y el pequeño Grogu.
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Ahora, ha ocurrido uno de esos acontecimientos que tocan el corazón pues el episodio cuatro de la tercera temporada, titulado “The Foundling”, ha contado con la aparición especial de un personaje relativamente nuevo, aunque interpretado esta vez en carne y hueso por un actor ya muy conocido en la saga.
Se trata de Ahmed Best, quien interpretó al personaje de CGI, Jar Jar Binks, en la saga de precuelas del principio de los 2000s. Ahora, sin animos de dar muchos spoilers, Best interpreta al caballero Jedi Kelleran Beq durante una secuencia de flashbacks que tiene Grogu en el episodio.
Este cameo se vuelve realmente especial cuando se tiene en cuenta el duro pasado que tiene Ahmed con la saga creada por George Lucas y su muy efusiva base de seguidores. Y es que durante la era de estas precuelas, que nunca calaron en los fans más viejos de la saga y mucho menos en los críticos, el personaje de Best, Jar Jar, fue probablemente el que se llevó la peor parte del rechazo global.
En una entrevista en 2019, Best habló sobre cómo la reacción del público a su personaje lo afectó tanto que incluso pensó en el suicidio:
“Me pegó fuerte. Vino directo hacia mí. Me llamaron todos los estereotipos raciales que puedas imaginar. Hubo esta crítica del dialecto roto de Jamaica, lo cual fue ofensivo porque soy descendiente de las Indias Occidentales, no soy jamaiquino. Fue debilitante. No sabía cómo responder. La depresión me golpeó. Fuerte. Estaba roto. Lo único que se me ocurrió para sentirme mejor fue cruzar el puente de Brooklyn. Pero esta vez, cuando crucé el puente, no vi las luces de Manhattan. No vi las torres [o] el potencial del trabajo duro y el ingenio. No vi nada; solo vi niebla. Me sentía cansado de tener que explicarme. Me sentía cansado de tener que defenderme y defender mi trabajo. Me sentí cansado de tener que luchar contra el racismo y los estereotipos raciales. Solo quería hacer un papel. Yo estaba agotado,” contó a Variety en ese entonces.
Con el pasar de los años, pues la última cinta de Star Wars de esta trilogía se estrenó ya hace más de 15 años, Best logró recuperarse de tal baja anémica y reconcilió su conexión con el material de George Lucas, trabajando en otros proyectos de la franquicia antes de su consagración con este cameo en Mandalorian, que fue recibido de manera muy positiva por los fans en las redes.