“Mantengámonos en contacto”, esta potente frase la dejó una abuela para sus familiares y amigos con el objetivo de indicarles que será mediante la tabla de oujia por donde “hablarán” con ella, citó People.
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La mujer falleció de cáncer a los 81 años en Breckenridge, Texas (Estados Unidos), pero antes se tomó el tiempo para elaborar varias tablas personalizadas con su foto. Con mucho buen humor y hablando un poco en serio, esta abuela murió bien clara en que, para comunicarse con ella en el más allá, no funcionan los móviles.
Funeral de risas
Durante el funeral de la abuela Jodie Perryman fueron repartidas decenas de cartones con la ouija impresa.
Los presentes cambiaron por un momento las lágrimas por risas al descubrir la última broma de la señora, un ser humano con una enorme capacidad para sonreír ante las adversidades, alguien que murió burlándose de la misma muerte.
No faltará algún nieto que le tome la palabra y quiera hacer “contacto” con la divertida Jodie, fallecida el pasado 12 de octubre. De hecho, su nieta Gracie Perryman, que viajó desde Austin hasta Breckenridge lo hizo, pero (todavía) sin éxito.
Ella contó que su abuela era una mujer fuera de serie. “Era divertidísima. Tenía un gran sentido del humor y un gran corazón. Ella amaba a su familia. Y solo cuidaba a las personas que la rodeaban. Era una gran mujer”, reseñó NBC Los Ángeles.
Precisó que la enfermedad apareció de un modo inesperado y avanzó muy rápido. Los médicos ofrecieron la opción de una cirugía que podía ser peligrosa a su edad, o dejar que la enfermedad siguiera su curso. Ella eligió lo segundo.
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Regalo insólito
Gracie recordó que su abuela anunció a sus familiares por Facebook que les daría ouijas para que la “llamaran” al otro mundo, y en efecto dejó las “ouijas” envueltas como regalo y se entregaron a unas 40 personas durante el funeral. “¿Qué diablos es esto?’”, exclamó la mujer. Al poco tiempo estallaron las risas en el salón mientras abrían los paquetes preparados por Jodie. “Todo el mundo se estaba muriendo de risa. Fue gracioso, así era ella”.
La nota generó diversos comentarios, la mayoría enternecidos con la forma tan creativa que tuvo la abuela para despedirse de este plano. “Días celestiales”; “Amé esto”; “Se abren muchos portales”, escribieron.
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