La Luna ejerce una influencia significativa en las energías de ciertas personas y en este julio muchas situaciones podrían mejorar si algunos signos del zodiaco trabajan en situaciones puntuales.
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Y es que la luna llena del 13 de julio ha dado un vuelco a las energías que proyectan algunos signos del zodiaco, unos más que otros, lo cual seguramente traerá más beneficios que conflictos con sus parejas o personas más cercanas.
Pese a que esa fecha pasó, la energía de la superluna de julio se ha convertido para cuatro signos en especial, una experiencia transformadora y reveladora durante este mes.
Superluna para Aries
Tocará el sector de la imagen pública de las personas del signo de Aries, todo el mundo empezará a hablar de él y pondrán su atención en lo social y laboral. Es una oportunidad para exponer lo mejor de sí, su autoridad y firmeza.
Superluna para Cáncer
Este periodo traerá grandes cambios en su vida. Este momento puede ser positivo y significar la oportunidad para encontrar nuevas formas de hacer que las relaciones funcionen. Es el momento de liberarse de patrones tóxicos.
Superluna para Libra
Se enfrentarán a un cambio importante en su espacio o cambio de ambientes. Si hay problemas o resentimientos, la superluna y su energía revelará todos los secretos que obstaculizaban su camino. Es un momento de sincerarse.
Superluna en Capricornio
Para este signo ha llegado el momento de la verdad, de cambiar el rumbo o ajustar el camino si siente que su felicidad no está llegando por el camino adecuado.
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Las lunas nuevas también ofrecen nuevos comienzos y la oportunidad de ver las cosas desde una perspectiva diferente, dependiendo de dónde caigan en el cielo.
¿Porqué la energía de la luna impacta en nuestras vidas?
El Ciclo Lunar es el momento en que la Luna orbita la Tierra en 29,5 días. La Luna tiene ocho fases consecutivas, que incluye una Luna Nueva y una Luna Llena.
Cada fase tiene un efecto diferente en nuestras emociones y ser conscientes de su impacto puede ayudarnos a comprender a quienes nos rodean, anticiparnos a ciertas actitudes o planificar algunas situaciones para que no se salgan de control.