Cada hogar le da identidad a la fanesca a través de su propia receta, la cual varía según las regiones y costumbres. Es por eso que cada receta es conservada y guardada como un tesoro.
PUBLICIDAD
Una muestra de ello fue nuestro recorrido por tres restaurantes del país, en Quito, Guayaquil y Cuenca, donde sus chefs cuentan cómo preparan su fanesca, nos revelan sus secretos, y nos motivan a continuar con esta tradición gastronómica.
Las recetas más ricas de su familia en esta fanesca
Gabriela Cepeda nos recibió en La Central Deli Shop, un ambiente relajado, con una propuesta fresca, para mostrarnos los secretos de su fanesca.
La fanesca de este local ubicado en el centro de Guayaquil, en la calle Panamá, es fruto de la tradición familiar, heredada de sus abuelas y tías, que le da un toque y sabor único.
Es así que desde hace 5 años prepara esta tradicional sopa ecuatoriana cuya garantía es “el sabor, buenos ingredientes, y el maní muy típico de la preparación costeña”.
La fanesca de La Central viene acompañada con empanaditas, maduro, queso, huevo, ají y cilantro. “Mi fanesca es minimalista y ligera”, acotó, por lo que es ideal tomarse un descanso de la jornada laboral y deleitarse con este platillo.
“Ecuador es un país sopero por excelencia y la fanesca es uno de los platos insignes, donde se ve la riqueza y el trabajo minucioso que implica nuestra gastronomía. Es una buena fotografía de nuestro país”, concluye.
La Central ofrece una amplia variedad de platos como suflé de yuca, cocolón de cangrejo con arroz soplado, entre otros; y en esta época de Semana Santa, el infaltable arroz con leche para acompañar.
El refrito es clave para sentir el sabor de la fanesca ecuatoriana
Una fanesca sin pescado, pero con un refrito que nos transporta a ese tradicional aroma y sabor de este plato tan ecuatoriano, es la propuesta de Nativo, restaurante ubicado al norte de Quito.
Patricio Mata, Chef Ejecutivo de Nativo, explica que la “cocina de calle gourmet”, estilo que caracteriza su menú, te ofrece desde un plato muy tradicional pero rico como un mote con chicharrón hasta uno de alta cocina. Cada uno de ellos es un “show en cada detalle”.
Esa misma experiencia del día a día se refleja en su fanesca, inspirada en la tradición familiar, donde su padre no consumía pescado, pero era imperdonable no tener esta preparación tradicional en casa.
“Nuestra fanesca no lleva bacalao, pero el refrito es especial (combina cebolla larga y perla, entre otros ingredientes), presenta sabores fuertes y un aroma inigualable, logrando esa experiencia completa para nuestros comensales”.
Renato Ramos, gerente de este restaurante, acompañó esta explicación con un Cranberry Nativo, un coctel que mezcla Fiestas de Quito con Colada Morada, ¡curioso pero delicioso”.
“Nativo se presenta desde lo ecuatoriano y ofrece un ambiente como tal: con cuadros originales de autores importantes, lámparas de sombreros de toquilla, cocina de autor, etc”, explica.
Todo en su conjunto logra “esa armonía que Nativo presenta y por lo que la experiencia es completa”, culmina Ramos.
Granos frescos y tiernos, el secreto de la preparación
La gastronomía es parte de la herencia familiar del chef de ‘La Placita’, Luis Inga, que compartió con nosotros su secreto para la fanesca.
“Hay muchas fanescas, pero la mía es tradicional”. El chef revela que el secreto para una deliciosa fanesca se basa en la selección de granos tiernos e ingredientes frescos.
“Es importante tomarse el tiempo para seleccionar el tipo de granos que se van a colocar en la fanesca y, sobretodo, que sean tiernos para que al probarlos se sienta su dulce sabor.
Además, la fanesca de ‘La Placita’ utiliza bacalao importado, cuyo sabor es más profundo.
Otro de los ingredientes, que le da el toque especial, es la achogcha, una verdura muy tradicional de los andes andinos.
Para el chef Luis, el amor por la gastronomía la comparte con toda su familia, cada uno con su sazón particular.