Las ventas de camiones crecieron 26,9% durante el 2021 en comparación al 2020, al pasar de 7.622 a 9.761 unidades vendidas en el último año, de acuerdo con la Asociación de Empresas Automotrices del Ecuador.
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A la par de este incremento, los accidentes de tránsito también han crecido en este segmento. Solo en el mes de enero, se reportaron 249 accidentes de tránsito en donde estuvieron involucrados vehículos de transporte pesado, según datos de la Agencia Nacional de Tránsito (ANT).
Con estos antecedentes y en el marco del retorno a la presencialidad al 100% en la mayoría de actividades económicas, a partir de lo cual aumentará la circulación vehicular en todos los segmentos, incluido el pesado, es importante tomar en cuenta recomendaciones importantes de seguridad frente a los riesgos potenciales a los que están expuestos los transportistas de este sector.
Oriente Seguros comparte una guía para contribuir a la seguridad vial del país.
- Condiciones mecánicas: El constante mantenimiento de vehículos de transporte pesado es fundamental, tomando en cuenta las largas distancias que recorren sin parar. Los descuidos y falta de acciones de prevención, representan un riesgo tanto para los conductores como para los vehículos aledaños. Por lo es importante tomar en cuenta cada parte del vehículo en inspecciones previo a un nuevo viaje, como la presión y labrado de neumáticos, nivel de agua y aceite, estado de los frenos, espejos, o sujetadores del tráiler. Estas recomendaciones previenen tanto accidentes como averías en las vías.
- Distractores, sobre todo el uso del celular: Esta es la principal causa de accidentes en todos los tipos de vehículos, representando el 28,3% del total de accidentes según la ANT; y es aún más sensible en el segmento de transporte pesado. Incluye todo tipo de actividad que desvía la atención del conductor al momento de conducir, tales como: uso del celular, pantallas de video, comida o cualquier otro elemento distractor.
- Exceso de velocidad: El 17,5% de accidentes de tránsito son por esta causa. Conducir en altas velocidades representa un riesgo inminente para el transporte pesado ya que, al tratarse de vehículos de mayor tamaño y peso, incrementa las posibilidades de perder la estabilidad y el control del volante y reduce la capacidad de reacción ante cualquier peligro o imprevisto en la vía.
- No respetar las señales de tránsito: Estar al frente del volante implica una gran responsabilidad, ya que no sólo se expone la vida del conductor sino también la vida de peatones y otros conductores, es por esto que es importante conocer e identificar las señales de tránsito. En el caso del transporte pesado, un problema común es no tomar en cuenta las alturas máximas al momento de pasar por debajo de un puente, es por esto que en ocasiones camiones y tráileres se han quedado estancados en puentes peatonales, causando una destrucción total, tanto del vehículo como de la infraestructura peatonal.
- Conducir con cansancio y fatiga: La fatiga o cansancio extremo al momento de conducir afecta directamente sobre la capacidad de manejar el volante, lo cual incrementa el riesgo de sufrir un accidente. Alrededor del 75% de conductores han sufrido fatiga al momento de conducir, en base a estadísticas publicadas por la ANT. Este estado es una consecuencia que afecta a los transportistas de vehículos pesados, quienes conducen por largos periodos de tiempo, sin pausas en carretera. Es por eso que se recomienda descansar antes de empezar un recorrido largo, mantenerse hidratado y tener ventilada la cabina.