Ecuador es uno de los países con mayor tasa de emprendimientos en la región, según Global Entrepreneurship Monitor. Uno de cada tres adultos ejecuta proyectos, según la estadística, por lo cual es importante conocer el camino correcto que hará que un negocio llegue al éxito. Por eso compartiremos algunos consejos y pasos a tomar en cuenta antes de introducirse en este mundo.
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Daniel Montalvo, CEO de una reconocida empresa de venta de artefactos tecnológicos; inició como emprendedor a sus 17 años con una marca de suplementos nutricionales, la cual, posteriormente vendió a un grupo de empresarios de Guayaquil. Años después continuó con sus emprendimientos y ahora, a sus 27 años, ha demostrado que las directrices que siguió para hacer crecer su negocio le han funcionado.
En una entrevista con Metro, Montalvo señala cuáles son los ocho pasos que un emprendedor debe seguir para iniciar su negocio con pie derecho.
Un consejo previo que Montalvo señala, es que el emprendedor “necesita estabilidad emocional porque hay muchos altos y bajos, para lo cual se necesita fortaleza”.
“Si estás dudando (en iniciar el negocio), debes saber que emprender es un deporte extremo”, resalta Montalvo. Y añade que quienes empiezan deben tomar en cuenta que habrá que hacer sacrificios y pagar el precio que eso implica.
LOS OCHO PASOS QUE DEBES SABER
1. Piensa en grande pero empieza en pequeño
Es decir, ya te visualizas a los grandes logros que vas a llegar, en comerte el mercado, pero mientras piensas en grande, sí empieza en pequeño.
Si debes tener la humildad de coger una escoba y barrer tu propio local lo debes hacer, al igual que contestar llamadas, saber de logística, de ventas y ser a la vez un gerente.
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“Los pies sobre la tierra pero la mirada en el horizonte”.
Además, la acumulación de esfuerzos del día a día es primordial, para llegar a tener una gran empresa. Una frase que me encanta dice: “tener éxito de la noche a la mañana a mí me tomó 10 años”.
2. Obsesiónate con lo que estás haciendo
Esa actividad debe ser en lo que piensas en todo el día, en lo que conversas y en lo que aprendes todo el día “hasta que la gente te diga: ¡oye! ya cambiemos de tema”.
3. Apréndelo todo
Aprende sobre los proveedores, los costos, el mercado, la gente que va a tu local, el sector, etc. Aprende absolutamente todo.
4. Ten claros los números
Ese es un error muy común que he visto con amigos o conocidos; que sí están obsesionados y tienen la certeza, pero, o no les gusta los números o no los tienen claros”.
Hay que saber que al principio a lo mejor no es una empresa rentable porque debes aprender mucho. Se debe conocer cuánto costará el producto, qué margen hay de rentabilidad, el costo que implica el personal, los costos fijos, costos variables o costos de inversión, etc.
Hay que tener los números claros, por más que otros los sepan, eso es algo primordial. Y si no me gustan o no lo sé, a aprenderlos, por lo menos los más importantes.
5. Rodéate de expertos y personas mejores que tú
Puedes contratar, rodearte, asociarte o tener a un mentor que sea ya un experto en cierto tema del cual tú le puedas consultar una duda y esa persona te la pueda responder.
6. Enfócate en crear una cultura, no solo una estructura
La estructura es un organigrama, pero una cultura es de qué está hablando mi empresa. Por ejemplo, “nos manejamos de una forma ética, somos una empresa alegre, proactiva, que se apoya, etc.”.
Es mucho más importante para mí una cultura, porque la cultura soporta todo cuando algo no está bien, la estructura no. Una estructura ve el resultado y la meta al final del mes, una cultura ve el propósito de por qué estoy yendo cada día a este lugar.
7. Ventas, ¿quién tiene mi dinero?
Un empresa se basa en ventas, para eso debes saber quién tiene tu dinero, porque así vas a saber qué estrategia de marketing vas a usar para que ellos puedan gastar e invertir en el negocio.
Recordar que el primer indicador de una empresa son ventas y rentabilidad.
8. Elévate por encima del promedio
Para qué quieres ser emprendedor si eres una empresa más de las que ya existen. Se trata de poner un propósito y hacer algo diferente, si no la competencia misma te va a enterrar. Es: elévate por encima del promedio.
Es pasar de buscar qué están haciendo los demás a yo poner la vara y marcar el camino para los demás. Algo que yo he aprendido y me encanta es que en la industria en la que estás, hay que ser el líder de la competencia. Y es una responsabilidad porque la competencia necesita alguien que te esté marcando el camino.